domingo, 25 de noviembre de 2012

Try a little tenderness (Frank Sinatra. 1979)

Frank Sinatra en una imagen de archivo. Años 50 (Las Vegas)
Egipto, 1979 Frank Sinatra repasa el clásico Try a little tenderness únicamente acompañado por la guitarra de Al Viola. Esta canción fue grada en dos ocasiones por Frank Sinatra siendo la de 1961, en el LP Nice and easy, la de mayor calidad. La podemos escuchar al final del post. Try a little tenderness es una canción compuesta por Jimmy Campbell, Reg Connelly y Harry M. Woods que hizo famosa Bing Crosby en 1933. Previamente había sido estrenada en 1932 por la romántica orquesta de Ray Noble y su vocalista Val Rosing. Sinatra, de nuevo, le dio un nuevo aire a esta preciosa balada.


Try a little tenderness (Traducción)

Puede que ella esté cansada, 
las mujeres suelen estar cansadas 
de llevar siempre el mismo traje raído. 
Pero cuando esté cansada, 
intentalo con un poco de ternura. 

Ella puede estar esperando, 
sólo anticipando todo aquello que nunca pudo poseer.
Pero mientras ella está esperando 
inténtalo con un poco de ternura. 

No es algo sentimental. 
Ella soporta su dolor con tu cuidado. 
Pero tan solo una palabra, 
suave y agradable 
lo hace todo más fácil de llevar. 
Ella no se arrepentirá. 
Las mujeres no olvidan que el amor es la mayor felicidad 
Y es todo tan fácil. 
Inténtalo con un poco de ternura.

Try a little tenderness from LP Nice and easy
 

martes, 13 de noviembre de 2012

23 mayo 1958 El Show Completo de Frank Sinatra

Frank Sinatra, década de los cincuenta
El 23 de mayo de 1958 se emitió por televisión uno de los numerosos "Bulova Show" de Frank Sinatra. La marca de relojes Bulova, patrocinaba este espacio televisivo donde Frank Sinatra presentaba sus nuevas canciones. En este capítulo, que podremos disfrutar aquí por completo, Frank cuenta como invitada con una cantante, cuanto menos, curiosa, llamada Pat Suzuki. Esta cantante de orígen japonés y voz potente ofrece los temas Something's gotta give y From this moment on. Como invitada de lujo también está Natalie Wood, que canta junto a Frank Sinatra el tema Theme there eyes (en el minuto 22'00) Pero, los momentos importantes son los que destacaremos a continuación. Frank Sinatra comienza el show dándole fuerte al swing con el eterno tema de Cole Porter titulado Night and day. Después del From this moment on de Pat Suzuki, Frank interviene con una de sus saloon songs. Esta vez se trata de la dramática Lonely town En la segunda parte del show podemos disfrutar del swing de Frank Sinatra en estado puro, el verdadero swing de 1958 En esta parte Frank canta I believe (en el minuto 19'57) y en el minuto 25'29 podemos ver la impresionante How are ya fixed for love? que nunca grabó en solitario. Este tema fue grabado por Frank Sinatra a dúo con Kelly Smith pero nunca lo cantó en solitario excepto en este show. La orquesta que acompaña a Sinatra en este programa es, como de costumbre, la de Nelson Riddle. Las fotografías que veremos al final de esta entrada, junto a Natalie Wood, datan de años posteriores.
Frank Sinatra y Natalie Wood, fumadores empedernidos.

domingo, 4 de noviembre de 2012

Nancy with the laughing face (1971)

Año 1941. Frank Sinatra y su hija Nancy, de un año, disfrutan un soleado día de playa en Long Branch, New Jersey. FOTOGRAFÍA DE "The Frank Sinatra Album" (Charles Pignone. Ed. Little Brown)

En 1971 Frank Sinatra cantó aquella maravillosa canción dedicada a su pequeña Nancy que, por aquella época, ya había hecho bailar a todo el mundo al ritmo de sus famosas botas hechas para caminar.
Una versión adorable del clásico de Sinatra.

jueves, 25 de octubre de 2012

Dean Martin & Frank Sinatra in Concert (1977) El concierto completo de Frank Sinatra y Dean Martin

Bienvenidos al reencuentro de dos amigos, dos figuras, dos compañeros, dos voces incomparables: Dean Martin y Frank Sinatra. 28 de mayo de 1977, Nueva York. Concierto completo. Part one: Part two: Part three: Part four:

viernes, 12 de octubre de 2012

Frank Sinatra: La banda sonora de Nueva York

Francis Albert Sinatra, niño, en las calles de Hoboken, posa con una bicicleta, uno de sus sueños de infancia más anhelados.
Hace unas semanas un amigo mío visitó Nueva York. Me contó que, de ese viaje, hay un momento que nunca olvidará. Cuando comenzaron a cruzar con un autobús el Puente de Brooklyn, por los altavoces sonó el conocido tema de New York, New York cantado por Frank Sinatra. Este año se cumplirán quince años desde la muerte de Sinatra y todavía sigue siendo, indiscutiblemente, la banda sonora de la ciudad que nunca duerme. Pero ¿por qué razón la voz de Frank Sinatra persiste en las entrañas de esa ciudad? ¿Por qué la voz de Frank Sinatra es respetada por el paso del tiempo? Para comprender esta comunión entre cantante y ciudad, tendremos que investigar sus orígenes, mucho antes de que el pequeño Franky abriera los ojos en el barrio de Hoboken. Para comprender esta circunstancia es necesario viajar en el tiempo y embarcarnos con Rosa y John Sinatra, en un barco que partía de Sicilia, hacia 1865 y que tenía como destino la nueva tierra prometida, L'America.

A principios del siglo XIX, Hoboken (New Jersey) venía de ser la zona residencial para los nuevos ricos de Nueva York pero se había convertido, poco a poco, en un barrio decadente y mísero, a pesar de conservar intactas las expectativas y esperanzas para los recién llegados. En el Nuevo Mundo habían atracado buques infestados de ratas que transportaban a holandeses, suecos, finlandeses, ingleses, irlandeses y escoceses alrededor de 1700 para que, hacia 1750, llegaran los franceses y los alemanes. A partir de 1845 llegó el mayor número de inmigrantes irlandeses, a causa de la hambruna que azotó Irlanda y se emplearon en fábricas dejando a un lado el cultivo agrícola. Los alemanes, después del fracaso de la revolución, llegaron en masa alrededor de 1848 y pronto se convirtieron en la nueva aristocracia. De esta manerta, El Viejo Continente había fijado en El Nuevo Mundo su nueva residencia y Nueva Jersey fue apodado el "Estado extranjero". Su industrialización fue rápida especializándose en vidrio, hierro, cuero, petróleo y municiones (Colt fabricó allí su primer revólver) Procedentes de Nueva York llegaba un flujo constante de inmigrantes para trabajar en las fábricas. Fue en 1861, cuando el promotor inmobiliario Charles K. Landis ideó un lugar llamado Vineland, una zona industrial y comercial que debería estar gestionada por gente de Nueva Inglaterra. Sin embargo, Landis necesitaba mano de obra para despejar bosques y cultivar la tierra. Consideraba a los italianos gente trabajadora y diligente y fue así cómo envió unos panfletos impresos a diversas ciudades italianas, ensalzando el clima mediterráneo de Vineland, sus anchas calles y sus árboles frondosos. De este modo los italianos llegaron a una tierra de transformaciones que bautizaron como L'America, una suerte de tierra prometida. En dicha remesa de inmigrantes se encontraban John y Rosa Sinatra, procedentes de Agrigento, Sicilia. Tras el nacimiento de su primer hijo, Anthony Martin (Marty, padre de Frank Sinatra), emigraron a Estados Unidos y se instalaron en Hoboken, la ciudad de la clase obrera de New Jersey. Tras su llegada de Sicilia, el abuelo de Frank Sinatra, John Sinatra, logró sacar a su familia adelante fabricando lápices para la American Pencil Company, por once dólares a la semana. Sin hablar ni escribir inglés, estaba claro que los nuevos inmigrantes italianos debían pasar calamidades y luchar para sobrevivir en este Nuevo Mundo, tierra extraña aunque, según aseguraban, llena de oportunidades. Muchos de aquellos inmigrantes, derrotados, volvieron a Italia y otros se quedarían para llevar una vida de escasez y desesperación. No obstante unos pocos, como los Sinatra, verían cumplidos sus sueños. En 1910 New Jersey era el estado con más tasa de inmigrantes por kilómetro cuadrado. Una sección de cinco manzanas del oeste de Hoboken estaba habitada por armenios, ingleses, franceses, italianos, griegos, alemanes, españoles, turcos, chinos, japoneses, sirios, rumanos, polacos, rusos, austriacos, suizos, judíos, belgas y holandeses. En Hoboken, los alemanes eran la élite social. Estos se jactaban de poseer cervecerías al aire libre, periódicos en alemán y bandas de música. El racismo y la xenofobia con los nuevos recién llegados estaba a la órden del día. La hegemonía alemana estuvo vigente hasta los inicios de la Primera Guerra Mundial, ya que muchos fueron detenidos por comportamientos pro alemanes. Durante este periodo, los irlandeses se herigieron como la clase hegemónica. Controlaban la política, la policía, los trabajos gubernamentales y los contratos... algo parecido a lo que sería más tarde la Mafia italiana. En el tercer peldaño del escalafón social estaban los italianos que vivían en casuchas ruinosas y destartaladas. Eran rechazados, ridiculizados y humillados por ser considerados una clase intelectualmente inferior. El céntrico vecindario en el que habitaban, Little Italy, estaba considerado como un gueto para los forasteros pero los italianos, orgullosos de su pasado y de su tradición, lucharon por una vida mejor, educando a sus hijos dentro del barrio para asegurarles una elevada autoestima y dignidad. Por lo general, los niños de Little Italy recibían una buena educación basándose en la disciplina. En definitiva, por muy malo que fuera New Jersey, Little Italy en Hoboken era un lugar preferible a su propio país ya que, al menos, en L'America, los niños albergaban sueños. Carecían de dinero pero tenían algo más importante: libertad y esperanza. 

Torna A Sorrento (Frank Sinatra)

Los padres de Frank Sinatra, Marty y Dolly, crecieron en una ciudad de personalidades y culturas muy distintas. El joven Marty Sinatra, de ojos azules y cuerpo tatuado, destacaba como boxeador profesional bajo el seudónimo de Marty O'Brien (recordemos que los irlandeses eran la clase dominante) Tras fracturarse la muñeca en 1926, Marty dejó el boxeo y trabajó de caldero en un astillero. Marty se enamoró de la despampanante Natalie Catherine Dolly Garavente, hija de inmigrantes procedentes de Génova. Cuando Dolly llegó a Estados Unidos con sus padres, contaba dos años de edad. Pronto se convirtió en una mujer atractiva de piel clara a la que, a menudo, confundían con irlandesa. Pero Marty y Dolly procedían de clases diferentes. Mientras los Sinatra eran humildes viticultores, los Garavente habían sido cultivados litógrafos. Marty era analfabeto y Dolly había ido a escuela primaria. La desaprobación de los Sinatra y los Garavente a la relación de sus hijos enturbió los primeros días de noviazgo. Pero, tras muchas discusiones y muchas lágrimas Dolly y Marty descubrieron que sus padres estaban equivocados y siguieron adelante. Dolly conveció a Marty y se fugaron juntos el 14 de febrero de 1913 (San Valentín) y contrajeron matrimonio ese mismo día en el ayuntamiento de Jersey City. Al cabo de un año, Dolly quedó embarazada de Frank Sinatra y sus familias ya aceptaron el matrimonio, aunque tuvieron que repetirlo y unirse por la iglesia. Tras el enlace católico Dolly y Marty se trasladaron a vivir a una ruinosa casa de cuatro plantas en el 415 de la calle Monroe, en Hoboken, en el corazón de Little Italy. Un doce de diciembre de 1915, en plena tormenta de nieve, Dolly Sinatra de veinte años de edad, da a luz a Fracis Sinatra. El parto fue difícil ya que tuvieron que emplear fórceps que dejarían marcado el rostro de Sinatra para toda la vida. El niño nació con el cordón umbilical rodeándole el cuello y no podía respirar. Afortunadamete la madre de Dolly, que hacía de comadrona, sumergió al bebé en agua helada y esto hizo reaccionar a sus pulmones. Dolly no podría tener más hijos. En la partida de nacimiento elaborada tras el bautismo en la iglesia católica romana de Saint Francis (2 abril 1916) figura el nombre de Francis Senestro. Veintitrés años más tarde corrigieron dicha partida de nacimiento y añadieron el nombre de Albert, aunque volvieron a equivocar el apellido. En esta nueva partida ponía Francis Albert Sinastre. Sea como fuere, Frank Sinatra nació en el 415 de la Calle Monroe, Hoboken, en una casa destartalada que hoy ya no existe y en cuyo solar se levanta un arco y una placa conmemorativos de esa fecha. Frank Sinatra nació en la época que se anunciaba The birth of a Nation de D.W. Griffith como "el espectáculo dramático más fabuloso que el cerebro del hombre haya imaginado y mostrado jamás", el año en que se ponían de moda los fonógrafos Victrola y el año en que Ethel Barrymore representaba Our Mrs. McChesney en el Lyceum o La flauta mágica se representaba en el Metropolitan de Nueva York. A este mundo de Primera Guerra Mundial abrió los ojos azules, el pequeño Francis Sinatra. Con un hijo para alimentar Marty Sinatra accedió al Cuerpo de Bomberos. El presidente Woodrow Wilson instauró la Prohibición federal en Hoboken y cerró doscientos treinta y siete bares, siendo la primera ciudad en experimentarla. Pero al gobierno le fue difícil hacer cumplir la Ley Seca pues la autoridades locales se negaban a cooperar. Así aparecieron los primeros uòmini rispètti y empezaron a infiltrarse en la vecindad y a fabricar y distribuir bebidas alcohólicas de contrabando. Los funcionarios, muchos de ellos amenazados o sobornados, hacían la vista gorda. Marty y Dolly sacaron partido de esta situación y abrieron su propia taberna en el cruce de las calles Cuatro y Jefferson de Hoboken. el local se llamaba "Marty O'Brien's" recuperando el seudónimo que Marty había empleado como boxeador. Como los bomberos no tenían permitido regentar este tipo de locales, pusieron la taberna a nombre de Dolly. Según recordaría Frank Sinatra en una entrevista, su padre Marty solía ayudar a los contrabandistas de alcohol, siguiendo a los camiones que repartían la mercancía y evitando que la policía los parase. Pero Marty fue herido de gravedad una noche y tuvo que dejar los negocios sucios para dedicarse por entero a su trabajo de bombero y al bar. Curiosamente las siglas del bar de Marty eran MOB, que se refiere también a los gángsters. Así que si el joven Frank Sinatra veía con sus amigos a un borracho por la calle solían bromear diciendo que era miembro de los MOB.

El pequeño Franky ya parecía tener de niño algo del estilo que popularizaría en los años cinccuenta.

La madre de Frank Sinatra, Dolly, fue el espejo en el que más tarde se reflejaría el cantante. Era una mujer llena de vitalidad, que solía subirse a la barra del O'Brien's y ponerse a cantar viejas canciones para animar al personal. Formó parte del comité demócrata y solía hacer cualquier chapuza con tal de ganarse unos dóalres. De hecho, cuando alguna jovencita italiana de Hoboken albergaba en sus entrañas un bebé que no quería, acudía a Dolly y esta practicaba abortos ilegales por cierta cantidad de dinero. En este ambiente tan prometedor creció Frank Sinatra. Hoboken no era un lugar bonito. Más bien, era duro y Sinatra sabía que más allá del puente, las luces brillaban con mayor intensidad. La adquisición de una radio por parte de la familia Sinatra fue vital para que el joven Francis comenzara a escuchar a Russ Colombo o a Bing Crosby, posteriormente y para que, a muy temprana edad, supiera a qué se quería dedicar. El pequeño Franky solía paliar el dramático día a día, marcado por el racismo al que le sometían sus compañeros de la escuela que le apodaban despectivamente dago (macarroni), cantando en casa o en las barras de los bares por un puñado de centavos. Poco a poco, Franky fue creciendo convirtiéndose en un autodidacta del canto, a fuerza de escuchar a Crosby. Pero Frank no se contentaba con esto. Él soñaba con cruzar el puente de Brooklyn y soñaba con Nueva York. Sus padres rechazaban amargamente su dedicación a la música pero todo cambió cuando, con diecinueve años (el 8 de septiembre de 1935) obtuvo su primera gran oportunidad: una prueba para actuar en el popular programa radiofónico Major Bowes and his original amateur hour emitido por la NBC, en directo, desde el Capitol Theatre de Nueva York. La prueba de Frank tuvo lugar junto a la de otro grupo llamado The Three Flashes, formado por Fred Tamburro, Pat Principe y James Petrozelli. Se desconoce cuál fue el detonante de la decisión pero, después de la prueba, Frank Sinatra se uniría a los Three Flashes y actuarían juntos como The Hoboken Four, interpretando el éxito de Crosby Shine La actuación fue todo un éxito, la voz de Frank Sinatra, sorprendentemente, destaca sobre el resto y el grupo obtuvo una oferta para actuar en varios locales de Nueva York. Pero Frank Sinatra sabía cuál era su potencial desde ese primer momento y abandonó el grupo después de tres meses de actuaciones para empezar a volar sólo. Frank Sinatra contó con Hank Sanicola como promotor musical y su carrera como solista navegaba por los locales de Nueva Jersey como el Rustic Cabin, donde consiguió su primer empleo regular y cuyas actuaciones, junto a la orquesta de Harold Arlen, eran retransmitidas por radio para Nueva York y tres estados más. Al fin, la voz de Sinatra, cruzaba el Puente de Brooklyn:

The Brooklyn Bridge (from It happened in Brooklyn)

No obstante, el empleo junto a la orquesta de Harold Arlen llegó a peligrar ya que el director no era partidario de tener un cantante italoamericano entre sus filas. Dolly Sinatra intervino en el asunto. Contactó con Harry Steeper, que además de alcalde de North Bergen era ayudante del presidente del Sindicato de Músicos de Nueva Jersey, James little Caesar Petrillo. Harry le dijo a Dolly que dejara el asunto en sus manos. Como consecuencia, Frank Sinatra conservó el empleo y triunfó noche tras noche convirtiéndose en la primera atracción del Rustic Cabin y en un nombre que ya comenzaba a sonar en Nueva York. Tal fue su éxito que, una noche, Cole Porter acudió al Cabin para escuchar su voz. Según Sinatra recordaría posteriormente: Estaba tan enamorado de su música que me parecía increíble tenerlo ahí sentado. Dediqué el tema de "Night and day" al señor Porter. Estaba tan nervioso que olvidé la letra y me limité a repetir el estribillo una y otra vez. Años después llegué a conocer bien al señor Porter. Durante el rodaje de "Alta Sociedad" se acercó a mí y me dijo: "No sé si recordarás la vez que nos conocímos en aquel club nocturno donde trabajabas. Fue la pero interpretación de 'Night and day' que he escuchado en toda mi vida. Afortunadamente, la volviste a grabar y quedó mejor"

Frank Sinatra posa con el camión publicitario de "La hora para cantantes amateur del Major Bowes", programa en el que comenzaría su carrera musical junto a "Los cuatro de Hoboken"
En un primer instante, Frank Sinatra tenía la intención de cambiar de nombre para tomar el seudónimo de Frankie Trent (en honor a su primo John Tredy, que murío a los veintiocho años de tuberculosis) y liberarse así de cualquier actitud de rechazo por parte del público norteamericano debido a su procedencia italiana. Pero asombrosamente y contrariamente a lo que Frank creía, su aire italiano y ese toque latino fueron sus mejores armas. Después de Rodolfo Valentino, parece que Nueva York estaba dispuesto a acoger y admirar a otra estrella italiana. Dolly Sinatra se opuso a que su hijo cambiara de nombre y finalmente el paellido Sinatra comenzó a sonar por toda la ciudad de Nueva York, de manera admirable. En 1937, Frank consiguió un trabajo diario en la NBC, por setenta centavos a la semana. Cantaba todos los días en la emisora, durante quince minutos. Por aquel tiempo el cantante comenzó sus clases de canto clásico y dicción con un profersor que le ayudó a perder su marcado acento de Nueva Jersey. Su marcado acento, precisamente, fue otra de sus mejores bazas. No logró perder el acento totalmente y es otro aspecto que hicieron de Sinatra una voz inconfundible para el público neoyorkino. En esta época, en la que alternaba sus actuaciones en el Rustic cabin y sus apariciones en la radio, Frank también iba y venía constantemente de Nueva York a Hoboken, para estar al tanto de la vida nocturna en los clubs de jazz de la gran ciudad. 

Frank Sinatra con su novia Nancy Barbatto (izquierda. Se casó con ella en 1939) y una amiga de la pareja. 1938, playa de Long Branch

Pero la popularidad de Frank Sinatra estalló de manera definitiva la noche del 30 de junio de 1939, cuando el joven Frank Sinatra debutó como solista de la banda de Harry James, en el Hippodrome Theatre de Baltimore. Más tarde, en julio de 1939, la orquesta de Harry James con Frank Sinatra de vocalista actuaron en la sala de baile Roseland, en Nueva York. Y también en Nueva York, el día 13 de julio, la banda grabó las primeras canciones que se publicarían en un sencillo de 78 revoluciones. El sencillo incluían los temas From the bottom of my heart y Melancholy Mood. El 31 de agosto de ese mismo año, Frank Sinatra grabó con la orquesta de Harry James la famosa All or nothing at all, pieza que se considera insuperable y que significó el comienzo de la Sinatramanía entre las bobby soxer, adolescentes neoyorkinas que suspiraban por la manera de cantar del nuevo fenómeno. Era la primera vez (mucho antes de la llegada de Elvis) que un grupo de chicas adolescentes gritaban, lloraban y se comportaban de manera histérica ante un cantante. La culminación de este fenómeno tuvo lugar en 1940, cuando Sinatra actuó en el Paramount Theatre de Nueva York. De esta noche existe un video sin audio pero que nos da una idea de lo que ocurrió aquella noche: aquí

Franky entre las bobby soxers
Definitivamente, Frank Sinatra había entrado por la puerta grande en la ciudad de Nueva York. Paradójicamente la difícil infancia en Hoboken y el rechazo de sus primeros años se habían transformado en admiración y respeto en la ciudad que nunca duerme y a la que, desde que llegó Sinatra, nunca le falta una canción. como no podía ser de otra manera, Sinatra, a lo largo de su carrera, siempre tuvo presente a la ciudad de Nueva York en sus canciones, aunque de maneras muy distintas.

Con Gene Kelly y Jules Munshin descubría la ciudad para la gran pantalla, en 1944:




Más tarde, en los años cincuenta, Frank Sinatra nos daba una visión más romántica de la ciudad, "era invierno en Manhattan...los copos de nieve se mecían en el viento, las calles se cubrieron con una capa de hielo..." Y en este paisaje aparece una chica que cambia el tiempo. Convierte el invierno en primavera. Es la canción Violets for yourt furs:





O descubrir Nueva York como una ciudad solitaria... en la canción Lonely town





Pero también hay lugar para el swing en Nueva York. "Me gusta Nueva York en junio, ¿y a ti?" Es la canción How about you?, una vuelta a la alegría.





Finalmente, podemos descubrir un otoño en Nueva York, "amantes que bendicen la oscuridad en los bancos de Central Park. Es el otoño en Nueva York, me gustaría volverlo a vivir"  Es la canción Autumn in New York:



Así que no es de extrañar que el tema New York, New York fuera propiedad de Sinatra, por derecho propio, mucho antes de que la canción fuera compuesta. Porque..."si lo hizo en Nueva York, lo pudo hacer realidad en cualquier parte..."

viernes, 28 de septiembre de 2012

Franky Sinatra y sus primeros pasos en el swing

La década de los cuarenta, una época en la que Frank Sinatra viajaba en trenes hacia los conciertos junto a la banda de Harry James o Tommy Dorsey y más tarde, en solitario.


¿Por qué Frank Sinatra sonaba distinto cantando las mismas canciones que elegían otros cantantes de la época? Esta sencilla pregunta es la que todo el panorama musical de la década de los cuarenta se hacía continuamente, al escucharlo en la radio, en un especial para televisión o en las pantallas de cine. El secreto estaba en el particular sentido del tempo que Sinatra ejecutaba en todas sus canciones. Manejar el ritmo de la canción, hacerlo suyo y entrar con su voz justo en el momento adecuado fue el gran hallazgo de este cantante que deslumbró en la década de los cuarenta para consagrarse más tarde y perfeccionando la misma fórmula, como una de las voces más importantes del siglo XX Frank Sinatra aprendió a manejar el tiempo de la canción con una de las bandas más perfectas de la época, la Big Band de Tommy Dorsey y del estilo que su director ehectuaba en su trombón. Pero Franky pronto quiso volar sólo, dejó la banda y como cantante solista se unió al arreglista Axel Stordahl. A mediados de los cuarenta Frank perfeccionó más su técnica, algo que se hizo más notable en las canciones de ritmo swing que reconvirtió a su manera. Frank Sinatra brilló especialmente y durante toda su carrera en esas canciones que estaban situadas a medio camino entre el swing y la balada, un ritmo relajado donde dominaba la situación y cuya máxima expresión podemos escuchar en el éxito de 1961 Nice and easy. Pero en sus primeros coqueteos que Frank tuvo con el swing, en la década de los cuarenta, ya podemos apreciar esa intención y ese particular sentido del tempo que Franky quería imprimir como sello propio en todas sus canciones. Así, en la película Step lively de 1944, Frank Sinatra graba Come out, come out, wherever you are. Esta sencilla canción compuesta para la ocasión por Sammy Cahn y Jule Styne no pasaría de ser una canción más al estilo de los cuarenta si no fuera porque la canta Frank Sinatra. Y en ella ya podemos encontrar "ese juego" que Frank juega con el ritmo, con la orquesta, con la letra y la melodía, ese sello que, realmente, fue el secreto de este cantante durante toda su carrera.

Come out, come out, wherever you are (Frank Sinatra 1944)
Sin embargo, la grabación del estudio tiene un ritmo algo más rápido que la que hemos visto en el video. Estudios de Nueva York, 17 de mayo de 1944, con la orquesta de Axel Stordahl:

viernes, 31 de agosto de 2012

If you are but a dream: Frank Sinatra, Woody Allen, Mia farrow y "Días de radio"

Frank Sinatra y Mia Farrow, durante su fugaz matrimonio


Además de la fascinación por Nueva York puede que el único nexo de unión que encontremos entre Woody Allen y Frank Sinatra sea Mia Farrow. Fuera de estas coincidencias, lo cierto es que director y cantante tenían muy poco que ver. De hecho, Sinatra y Allen sólo coincidieron una vez, vía teléfono. Cuando salió a la luz el conocido drama familiar entre Mia Farrow y Woody Allen, a causa de la relación del director con la hija adoptiva de ambos, Soon-Yi, Frank telefoneó a Mia para interesarse por ella, por si necesitaba algún tiopo de apoyo (Mia farrow y Frank Sinatra siguieron teniendo una buena amistad, después de romper su relación matrimonial) Aunque Mia Farrow le dijo que no necesitaba nada, Frank telefoneó acto seguido a Woody Allen para decirle: No sé qué demonios está pasando aquí, pero te estoy vigilando; sólo quiero que lo sepas. Y al parecer, este fue el único contacto entre cantante y director. Poco podemos sacar en claro de esta historia excepto que Mia farrow no tuvo mucha suerte con estos dos maridos. Pero lo importante de esta entrada es la película Radio days (para ver reseña donde se detiene el tiempo). Para una escena inolvidable de esta película en la que el protagonista Joe pasea por primera vez por el Radio City Music Hall, Woody Allen elige la canción If you are but a dream cantada por un jovencísimo Frank Sinatra, como colofón para una escena estéticamente perfecta. Frank grabó esta canción junto a la orquesta de Axel Stordahl y podemos ver el video a continuación:



IF YOU ARE BUT A DREAM - FRANK SINATRA - 1944 from Maynardcat-2 on Vimeo.
Woody Allen y Mia Farrow, 1980

Cambiando de tercio, recomiendo el post titulado Esta noche que Francisco Machuca ha escrito en su blog El tiempo ganado sobre el álbum de Frank Sinatra September of my years. Para leerlo aquí

domingo, 26 de agosto de 2012

Without a song (Sidney. 1961)

Sesión fotográfica dentro del camerino, antes de un concierto.

A entregas vamos viendo, poco a poco, todo el repertorio que Frank Sinatra cantó en su concierto de Sidney '61 Hoy descubriremos Without a song además de una sorpresa final. La popular canción compuesta en 1929 para el musical Great day por el músico Vincent Youmans fue grabada y popularizada por Perry Como, en 1951. Frank Sinatra la grabó junto a la orquesta de Tommy Dorsey en la década de los cuarenta como una balada pero volvió a grabarla, en solitario, en la década de los sesenta convirtiéndola a ritmo de swing, cambiando sensiblemente la letra a su gusto y posteriormente, la incluyó en su repertorio en directo. De esta versión destaca una parte en la que Sinatra prácticamente sólo susurra la letra en un tono muy bajo para, después, acentuar el estallido final de la canción.

Without a song (letra) 

Sin una canción el día no terminaría 
Sin una canción el camino no acabaría 
Cuando las cosas se tuercen 
un hombre no tiene un amigo 
sin una canción. 

Ese campo de máiz no volvería a ver un arado 
Ese campo de maíz estaría hoy desierto 
Un hombre ha nacido pero no será bueno 
hasta que no encuentre una canción. 

He encontrado trabajo y problemas pero, 
que yo sepa, el Jordan sigue fluyendo 
Y yo voy a durar, tanto como esta canción, sonando fuerte en mi alma. 

Nunca supe lo que hizo la lluvia para caer 
 Nunca supe lo que hace crecer la hierba 
Lo único que sé es que no hay amor en absoluto sin una canción. 

He encontrado trabajo y problemas pero, 
que yo sepa, el Jordan sigue fluyendo 
Y yo voy a durar, tanto como esta canción, sonando fuerte en mi alma. 

Nunca supe lo que hizo la lluvia para caer 
Nunca supe lo que hace crecer la hierba 
Lo único que sé es que no hay amor en absoluto sin una canción.
Frank Sinatra con su perro. Década de los sesenta.

Como sorpresa final, podemos escuchar ahora las sesiones de grabación descartadas de la canción She's funny that way, para el LP Nice and easy, pertenecientes a la sesión de grabación del día 2 de marzo de 1960 (aunque en el video, erróneamente, aparece 1959) En un primer instante Sinatra juega con la melodía y ensaua diferentes giros de voz y adornos que distan mucho de loq ue a la postre será la versión definitiva que podemos escuchar en el LP original. En cualquier caso, escuchar estos ensayos y tomas desechadas, es un privilegio:

lunes, 20 de agosto de 2012

It's all right with me: Distintas maneras de ver a Cole Porter

Frank Sinatra, durante una cena en 1962, entre Juliet Prowse (izquierda) y Judy Garland
En 1953 se estrenó el musical Can-Can para el que Cole Porter compuso la canción It's all right with me, a la postre, uno de los temas más versionados del autor. De hecho, era una melodía tan versátil que Frank Sinatra la cantó a modo de balada para convertirla, en 1982, en un tema swing junto a la orquesta de Quincy Jones. Aquí tenemos las dos versiones. En el primer video, la balada, aparece junto a la bailarina y actriz Juliet Prowse.

It's all right with me (versión lenta) It's all right with me, versión swing para el LP L.A. is my lady

miércoles, 18 de julio de 2012

Celeste Holm nos ha dejado. Un recuerdo con Frank Sinatra

Frank Sinatra y Celeste Holm, la divertida pareja de periodistas en "Alta sociedad" (1956)
Neoyorkina de nacimiento, la actriz Celeste Holm ha muerto también en Nueva York el pasado quince de julio a sus 95 años. Celeste Holm participó en películas tan recordadas como Eva al desnudo (All about Eve. Jospeh L. Mankiewicz, 1950) y junto a Frank Sinatra apareció en The tender trap (Charles Walters. 1955) y High society (Charles Walters. 1956) En este última cantó junto a Sinatra la canción Who wants to be a millionaire? Esta canción puede estar muy actual con los tiempos que corren... ¿Quién quiere ser un millonario? Sirva esta entrada para dedicar un recuerdo a la actriz Celeste Holm.
 

lunes, 16 de julio de 2012

Frank Sinatra: Los proyectos que no llegó a realizar y el retrato de Norman Rockwell

Frank Sinatra baja de un helicóptero con un Jack Daniel's en la mano. Genio y figura

Creo que una adecuada manera para empezar este post sobre los proyectos de Sinatra que nunca se llevaron a cabo es este medley inédito sobre canciones de George Gershwin. Frank Sinatra ofreció este medley, que incluye Summertime, en Buffalo, en 1982. No he podido incluir el video pero les dejo el enlace. Para escuchar  pinchar aquí

Summertime es una de las canciones que más echamos de menos en la discografía oficial de Sinatra. Sin embargo, este video, recoge una grabación inédita de este tema para la radio, en 1944:


Después de esta maravillosa versión del clásico de Gershwin, veremos todos los proyectos que Frank Sinatra, por uno u otro motivo, tuvo que abandonar en la cuneta. A man and his music fue el título de un programa de televisión que repasaba su carrera en el mundo de la música. También fue un LP doble que publicó en la misma época con Reprise pero, lo que todo el mundo desconoce, es que A man and his music fue un tema compuesto por Sammy Cahn y Jimmy Van Heusen para que Sinatra lo cantara bien en el especial televisivo, bien en el LP homónimo. Nunca cantó Sinatra este tema específicamente compuesto para él porque nunca le convenció. Hubo un proyecto real para incluir el tema en el álbum September of my years pero, aunque todo estaba preparado para la grabación, Sinatra la descartó.
Sinatra recording 60s
Uno de los descartes más dolorosos para los fans de Sinatra fue el LP dedicado a las canciones italianas. El proyecto fue llevado a cabo por Don Costa, a requerimiento de Sinatra. Don Costa arregló para Frank canciones como Anema e core o Al Di La. El título del álbum era Frank Sinatra: The Italian Songbook y hubiera sido el inmediatamente posterior al Sinatra & Strings de 1962 Incluso llegó a tener una portada y una fotografía de Frank Sinatra para la ocasión. La lista de canciones definitiva de The Italian Song Book incluía La strada, Al Di La, Anema e Core, Arrivederci Roma, Just say I love her, Non dimenticar y Mala femmena. Este es el documento oficial de Reprise que demuestra la existencia del proyecto:

Aunque en numerosas ocasiones actuaron juntos para la televisión, Louis Armstrong y Frank Sinatra nunca llegaron a grabar un álbum, hecho que lamentó profundamente el cantante italoamericano: Estar en presencia de Louis me llenaba de humildad. Llegó a ser una leyenda viviente porque tenía las aptitudes de un artista auténtico, la fuerza de un demonio, el corazón de un león. Lo traté tanto en momentos de gloria como de adversidad y él nunca cambió. Le tengo un gran cariño a Jimmy Canon por haber acuñado aquella frase maravillosa sobre Louis: "Es un orgullo para su raza: la raza humana" (Frank Sinatra)


Videos tu.tv Con Ella Fitzgerald ocurrió más o menos lo mismo. El valle del arco iris (Finian's rainbow) fue un proyecto de una película de dibujos animados que contaría con las voces de Ella Fitzgerald, Louis Armstrong y Frank Sinatra. El proyecto no se llevó a cabo por falta de presupuesto, aunque sí se conservan grabaciones de la bandfa sonora todavía inéditas hoy en día. Otro de llos proyectos más ambiciosos concebidos para Sinatra fue un álbum de duetos junto a Ella Ftizgerald. Desde que fundó Reprise Records Sinatra tenía en mente este proyecto. Ella Fitzgerald se mostró entusiasmada con la idea cuando Frank Sinatra contactó con ella en 1965 pero transcurrió un año sin que se concretaran los detalles. Frank retomó la idea en 1967, cuando Ella y él grabaron juntos un especial para la televisión. Nelson Riddle fue el encargado de arreglar las canciones para el proyecto del LP Fitzgerald-Sinatra. Arregló Love and marriage, A taste of honey y Necessity. Según el pianista Bill Miller: Incluso llegamos a realizar un ensayo con Frank y Ella para le álbum. Estábamos Frank, Ella, Nelson Riddle, Joe Pass y yo mismo y repasamos unas cuatro canciones de las propuestas para el proyecto. El ensayo fue estupendo pero no quedaron satisfechos con los temas elegidos. Frank era muy exigente respecto al material. A Frank le ilusionaba la idea de hacer un álbum con Ella porque le encantaba trabajar con ella. Intentó resucitar el proyecto en varias ocasiones. También sé que Frank y Norman Granz, representante de Ella Fitzgerald, no se llevaban bien y que quizá por eso no se llegó a grabar. (Bill Miller)
Ella Fitzgerald y Frank Sinatra (50s)

Es una pena que no llegase a hacerse realidad porque siempre que Frank y Ella se juntaban era algo mágico (Al Viola)






Un disco de duetos con Lena Horne fue otro de los proyectos que estuvieron a punto de realizarse. El LP se grabaría en 1982 con los arreglos de Quincy Jones y llegaría a ser un LP con tres discos según palabras de Sinatra: Estábamos listos para grabar y a Lena le surgió un problema en la voz, un nódulo en las cuerdas vocales. Quincy intentó reencauzar el proyecto varias veces, pero al final no pudo ser. Era una tarea titánica; iban a ser tres discos. (Frank Sinatra) 

Pero las notas de Quincy Jones del 3 de febrerio de 1983 revelan que el LP, de edición de lujo, contaría con una orquesta donde figuraban grandes estrellas como Dizzy Gillespie, Herbie Hancock, Toots Thielemans y George Benson. Serían 36 canciones, entre las que se encontraría temas estándar de todos los tiempos como Round midnight, The lady is a tramp, It's all right with me (recuperada para el LP L.A. is my lady), Girl talk, Blues in the night, una nueva versión de I've got you under my skin en solitario para Frank o Mack the knife. Un LP que hubiera entrado directamente en la historia del jazz. Este es el borrador del proyecto de Quincy Jones:

Quincy Jones había alquuilado los estudios A&M para todo el mes de febrero
Sin embargo, Lena Horne participaría en el disco Duets II en 1994

En marzo de 1977 Frank Sinatra realizó dos sesiones de grabación para un LP titulado Here's to the ladies y esta fue la última vez que trabajaron juntos Nelson Riddle y Frank Sinatra, aunque el disco nunca vio la luz. Este LP contenía canciones con nombres de mujer como Sweet Lorraine o una nueva versión de Nancy, When Joanna loved me, Barbara, una nueva versión de Laura, Emily, Linda, Stella by starlight y Elizabeth.

Digital Sinatra fue un proyecto de Frank Sinatra Jr para su padre. En 1988 Sinatra padre ensayó en el estudio de grabación acompañado por una orquesta de jazz de 35 músicos entre los que destacaban el saxofonista Plas Johnson o el pianista Bill Miller. Billy May, al a batuta. El proyecto estaba diseñado para ser la primera edición de Frank Sinatra en compact disc. Los temas seleccionados eran totalmente nuevos, nunca cantados por Frank. Después de esa única sesión el proyecto se abandonó.

Otros proyectos abandonados a destacar sería un nuevo álbum de canciones de Navidad, del cual se conserva hasta el diseño de la portada, o un nuevo álbum junto a Antonio Carlos Jobim del que también conservamos la portada y alguna grabación. Este LP titulado Sinatra-Jobim se concibió en 1969 como continuación del Francis Albert Sinatra & Antonio Carlos Jobim de 1967 Aunque se abandonó el disco muchos de los temas aparecieron en el LP de 1970 Sinatra & Company Esta hubiera sido la portada del LP Sinatra-Jobim:
Proyecto de portada para el inédito Sinatra-Jobim de 1969
Como vemos, aunque Sinatra ha sido uno de los cantantes que más canciones han grabado en la historia de la música, también perdió la oportunidad de llevar a cabo grandes poryectos. Como última curiosidad veremos al Sinatra amante de la pintura. Como ya hemos abordado en este blog, en ocasiones anteriores, Frank Sinatra se dedicaba a la pintura en sus ratos libres. En la década de los ochenta tuvo la oportunidad de visitar al artista Norman Rockwell quien, a su manera, lo inmortalizó en un retrato propio de su estilo:

Sinatra by Norman Rockwell (1973)
Encuentro entre Sinatra y Rockwell en la década de los ochenta


PD: La mayoría de las fotografías y la información de esta entrada están incluidos en el libro Frank Sinatra: El Álbum (Global Rythm) de Charles Pignone, excepto la fotografía con Rockwell, tomada del libro Frank Sinatra: The Family Album (Charles Pignone; Little Brown)

sábado, 7 de julio de 2012

Frank Sinatra & Dinah Shore, una vida actuando juntos

Frank Sinatra en 1963. Cortesía de Elena Gonzalvo
Frank Sinatra y Dinah Shore, en la década de los cincuenta
A lo largo de sus respectivas carreras, Frank Sinatra y Dinah Shore cantaron juntos en varias ocasiones aunque nunca grabarían en estudio ninguna canción. Hoy he encontrado una nueva actuación que todavía no había visto y que data de 1963, año en que Frank Sinatra, entre otras cosas, protagonizó la película Come blow your horn Veremos el video que comentaba de 1963 y aunque ya fueron aquí publicados, los otros medleys en que Shore y Sinatra coincidieron: 1970, "Dinah's place" (cita culinaria)
Dinah Shore y Frank Sinatra, en los cuarenta
Cantando juntos en la década de los cincuenta.

martes, 26 de junio de 2012

Frank Sinatra en el Madison Square Garden, The Main Event

Durante el concierto en el Madison Square Garden, The Main Event

"Para ser sincero, no me gusta hacer televisión cada semana. Requiere demasiada energía -tensión, prisas y ensayos- para el resultado que se obtiene. He visto a la televisión consumir el talento de mucha gente. Sé lo que te hace por dentro" (Frank Sinatra) 

 El 27 de mayo de 1950, Bob Hope presentó a Sinatra que cantó impecablemente la canción Come rain or come shine y así dio comienzo una carrera televisiva de 45 años. Curiosa, sin embargo, parece la opinión que Frank expresa sobre el mundo de la televisión en el texto que encabeza esta entrada. Afortunadamente, la televisión no pudo con su talento.Sin embargo el cantante no dejó de utilizar la televisión como medio publicitario. Para su flamante regreso, Ol' blue eyes is back, Sinatra preparó un especial junto a Gene Kelly y un concierto que sería emitido por televisión, celebrado el 13 de octubre de 1974, en el Madison Square Garden de Nueva York y subtitulado The Main Event (El gran acontecimiento). Como hemos visto, a Sinatra no le gustaban los especiale spara la televisión y para este Main Event estuvo especialmente nervioso. Encontró en Barbara su mejor tranquilizante.  Para el concierto el escenario se montó como un cuadrilátero de boxeo y Howard Cossell (comentarista deportivo) fue el presentador. La retransmisión fue de ámbito mundial y le siguió un álbum homónimo que saldría a la venta en noviembre de ese 1974 El concierto es uno de los más legendarios y recordados del cantante. He encontrado un video en Youtube que recoge sus mejores momentos y que agradezco a su autor:
También quería dejar aquí, la colaboración que hizo Gene Kelly para el especial Ol' blue eyes is back de 1973 Comienza presentado Sinatra, recordando las películas en las que actuaron juntos y aparece Gene Kelly. Cantan juntos y al final, Frank canta Nice'n'easy mientras Gene baila:

sábado, 16 de junio de 2012

Letal como un solo de Charlie Parker (Javier Márquez Sánchez. 2012) Frank Sinatra como personaje

Portada de "Letal como un solo de Charlie Parker" donde aparece John Wayne, Frank Sinatra y el protagonista, Eddie Bennett

Frank Sinatra tiene el mundo atado a su dedo también en la nueva novela de Javier Márquez Sánchez titulada Letal como un solo de Charlie Parker y editada por Editorial Salto De Página. Así, al menos, lo indica el título de uno de sus títulos y la trama de esta historia que, de alguna manera, está salpicada por la presencia del cantante. Desde el comienzo, la referencia a Sinatra es un constante. Como una ironía, la novela comienza el mismo día que la muerte del cantante, el 16 de mayo de 1998, en un cementerio donde el protagonista, Eddie Bennett (sin duda, otra ironía el apellido Bennett) asiste al entierro de una antigua vieja gloria de Hollywood, para después realizar un trabajito en un bar, ajustando las cuentas a un tipo. A través de un acertado flashback, el lector es trasladado a Las Vegas de 1955, donde un Eddie Bennett algo más joven y apodado el figura (debido a sus relaciones del pasado con la Mafia) se desenvuelve como un pez en el agua. Trabaja como "solucionador de problemas" en la empresa de seguridad privada que su antiguo Capitán de guerra, Larry Marvin, ha construido para los grandes estudios de Hollywood. Se hospeda en una suite de lujo en el Hotel Flamingo y su popularidad es tan alta que suele codearse con Dean Martin o Frank Sinatra para probar los mejores cócteles de Las Vegas, en el caso de Eddie, el Southern Comfort. Todo cambiará para Bennett el día en que una desconocida actriz de Las Vegas aparece muerta en un lago. La difunta actriz tenía un discreto papel en El conquistador de Mongolia, película rodada en el desierto de Mesa, St. George, protagonizada por John Wayne y producida por Howard Hughes. El encargo de Marvin es que Bennett viaje hasta el rodaje de St. George y firme los documentos forenses que confirman el suicidio de la actriz. Pero Bennet y su espíritu detectivesco no se conforma con esa excesiva urgencia por archivar el caso y lo que parece una muerte sin importancia de una actriz aspirante, poco a poco, va convirtiéndose en una entramada conspiración donde está implicada la Mafia (en concreto, el mal olor llega hasta uno de los grandes capos, Sam Giancana), la CIA y el Ejército de los Estados Unidos. Bennett viajará desde las luces y los casinos de Las Vegas hasta el árido desierto de St. George donde tratará de manera muy próxima a John Wayne. Se codeará con los peores matones de la Cosa Nostra y lo más selecto de Hollywood. Entre detalladas recetas de cócteles, canciones de Sinatra, chistes de Dean Martin y las caderas de Janet Baker (una joven periodista), Eddie Bennett intentará llegar hasta lo más profundo del asunto, aunque esto le lleve a limpiar la peor carroña que haya conocido, aunque en ello se juegue la vida y cave su propia tumba ante el aliento del temido Sam Giancana.
John Wayne, Dean Martin y Frank Sinatra aparecen aquí junto a Bob Hope y Reagan.

Y como he dicho anteriormente, Frank Sinatra aparece como un personaje más en esta novela, así como Dean Martin o John Wayne. La fascinación que el autor, Javier Márquez Sánchez, profesa por la música y el estilo de Sinatra o Martin y el concienzudo estudio de sus vidas (como nos demostró con el estupendo Rat Pack: viviendo a su manera) se traslada al papel para construir con ellos dos personajes tan creíbles que nos invita a pensar que, realmente, conoció y compartió barra de bar con los dos cantantes. Frank y Dean no son sólo dos personajes más en esta novela, son realmente ellos. El comportamiento de Sinatra es el que hubiera tenido de haber estado implicado en una historia así. La actitud de Dean en la barra del bar es la que realmente tenía, tristemente contento, ante una copa de J&B o un dry martini, riendo con sus amigos o en soledad. Y aunque estoy incidiendo en los dos cantantes, el tratamiento que recibe John Wayne es igualmente auténtico.
Dino, Frank, los años cincuenta

En concreto, Frank Sinatra, aparece en tres ocasiones y sólo en una de ellas está presente e interactúa con Eddie Bennett. En la primera aprición, una corista nos cuenta cómo el cantante se echa a llorar en sus brazos cada noche por no soportar la ausencia de Ava Gardner. En la segunda aparición, al imagen del  hombre derrotado se sustituye por la del triunfador, precisamente como le ocurrió realmente en vida. Frank Sinatra canta en el salón Copa del Sands, I've got the world on a string, My funny Valentine y Three coins in the fountain. Después del concierto, se sienta con Eddie Bennett y le agradece su papel en el asunto de unas fotografías comprometedoras que hizo desaparecer. En realidad, Bennett realizó el encargo de las fotografías como un trabajo más, sin saber que el mismísimo Frank Sinatra estaba delante de esa cámara indiscreta. Y la tercera y última aparición, la reservo porque afecta al desenlace de la hsitoria.
Frank Sinatra, Las Vegas. Delante del hotel Sands.

En resúmen, Letal como un solo de Charlie Parker, es una novela negra más que admirable, una historia perfectamente ambientada en los incomparables años cincuenta de Las Vegas, la Mafia, los cócteles, la delincuencia y el swing. En definitiva, una oferta qeu no podrás rechazar. Les dejo ahora con dos de los temas que pertencen a la banda sonora de esta novela y con una cita del autor: "Cuando Frank cantó I've got the world on a string, todos los hombres en el salón Copa del hotel Sands nos sentimos triunfadores, pero él fue el único ganador cuando cantó My funny Valentine"


martes, 12 de junio de 2012

The Bulova Frank Sinatra Show (1951)

 

A Mario, que prefiere la época que Frank Sinatra pasó en Columbia.

Precisamente a esa época pertenece este Boluva Show de 1951. Aunque la mayoría de adictos a la música de Sinatra prefieran la época de la década de los sesenta con Reprise o bien la época anterior en Capitol Records, no es de extrañar que haya quien prefiera los finales de la década de los cuarenta y los comienzos de los cincuenta, que Frank Sinatra grabó con Columbia. Precisamente, en la anterior entrada alabábamos la pureza en el canto que Frank Sinatra exhibía en el tema That old black magic. Precisamente en Columbia, la pureza de Frank Sinatra en algunas baladas como Why try to change me now, Body and soul o I'm a fool to want you no se llegaron a superar en posteriores grabaciones del cantante. Pero también con Columbia, Sinatra conoció su momento más bajo. El desenlace trágico de su relación con Ava Gardner, los intentos de suicidio o la adicción a las patillas terminaron por minar su capacidad vocal que llegó a perder por completo. Afortunadamente, esa época pasó pronto y casi inmediatamente llegó el éxito en De aquí a la eternidad, la vuelta a la popularidad y la era Capitol. En esta ocasión veremos completamente un capítulo de The Frank Sinatra Boluva Show en 1951, espacio patrocinado por la marca de relojes Boluva que sería el predecesor del definitivo Frank Sintra Show que, en la segunda mitad de la década de los cincuenta, llevó a Sinatra a los más altos índices de audiencia. Aquel Frank Sinatra Show contaría con mejores invitados (Dean Martin, Bob Hope, Bing Crosby, Ella Fitzgerald, Louis Armstrong o Peggy Lee) que este Boluva show donde algunos invitados ni siquiera aparecen con Sinatra en pantalla y donde, hoy en día, algunos de sus números quedan algo desfasados, algo que no ocurriría con los shows que Sinatera grabó posteriormente.En este show tenemos la oportunidad de ver a Frank Sinatra cantando standards como My blue heaven, My romance (junto a Jane Hutton) o Hello young lovers.

miércoles, 6 de junio de 2012

Los mejores Lps de Frank Sinatra: "The Voice", esa vieja magia negra


En lo que a canciones se refería, lo primero que Frank miraba era la letra. Siempre quería saber lo que decía la canción para ver si le gustaba o no. Siempre hacía el mismo comentario: "De la música que se encargue otro. La letra es asunto mío" (Alan Livingstone) Y en estas palabras de Livingstone se podría resumir a la perfección el secreto de Sinatra, la razón por la que saber llegar, contando una canción antes de cantarla. La cuenta para sí mismo, antes de grabarla, la interioriza y después la canta y la graba en el estudio, transmitiéndola al público. El 29 de enero de 1945, un Frank Sinatra de veintinueve años grabó en los estudios Columbia, junto a la orquesta de Axel Stordahl, una primera selección de temas entre los que se encontraba My melancholy baby, Where or when, If I loved you y All the things you are. En aquel año grabaría más de cuarenta canciones. Un año más tarde, el 3 y el 24 de febrero y el 10 de marzo de 1946, Sinatra y Stordahl volvieron a la carga con All through the day, Begin the beguine, They say it's wonderful, Home on the range, How deep is the ocean y That old black magic. Doce sesiones de grabación en 1945 y dieciséis en 1946 darían como fruto diecinueve canciones que se recopilarían y se venderían en una serie de álbumes que alcanzaron un gran éxito como es el caso de The Voice, primer álbum de 78rpm Con The Voice se considera a Frank Sinatra el primer intérprete en grabar un álbum conceptual, donde las canciones se relacionaran entre sí; esto fue algo que repetiría continuamente en la década siguiente, con Capitol y durante toda su vida. Para The Voice, Sinatra planeó canción a canción el disco y este planteamiento tuvo gran acogida por sus fans. Su energía, su "swing", su manera de cantar cada tema, sacando el mayor partido a su amplitud vocal, le convirtieron en el cantante más reconocido por el público. De esta época podemos destacar el tema That old black magic, esa vieja magia negra que, según decían los críticos, parecía tener en su voz para, de esta manera, hechizar a un público, sobretodo femenino, cada vez más entregado. Aquí podemos ver una versión en directo de aquella época con That old black magic


martes, 29 de mayo de 2012

El tiempo se detiene... cuando Frank Sinatra canta



En efecto. El tiempo es inútil, ineficaz, cuando Sinatra canta y consigue detener el despiadado avance del reloj. De esta manera os invito a mi nuevo blog, El tiempo detenido, que toma el relevo de El sueño eterno. Y para celebrarlo, dejo aquí un capítulo completo del célebre Frank Sinatra Show con una Ella Fitzgerald espectacular, como invitada de lujo.Quedna todos invitados a detener el tiempo.


lunes, 21 de mayo de 2012

Frank Sinatra & Dean Martin: Swingin' and Dingalin'

En septiembre de 1976, Frank Sinatra reunió a Dean Martin y Jerry Lewis durante el telemaratón del Día del Trabajo de Lewis contra la distrofia muscular. Martin y Lewis llevaban veinte años distanciados.
Frank Sinatra y Dean Martin estuvieron siempre muy unidos, profesional y personalmente, pasando la vida lo mejor posible, entre juerga y juerga. A pesar de ello, no eran iguales. Sinatra prefería el Jack Daniel's y Martin, no se sabe si por hacer honor a su apellido, el Dry Martini. Dino era mucho más tranquilo, mientras que Sinatra solo concebía las madrugadas si estaban dedicadas a la juerga. Se podría decir que Sinatra desequilibró la vida de Martin... hasta cierto punto. En cualquier caso, hicieron un equipo estupendo. En 1958 se produjo uno de los momentos más felices de Sinatra, al hacer lo que más le gustaba, mezclar trabajo con amistad. Frank dirigió la orquesta y arregló las partituras para el LP Sleep warm que Dean Martin grabaría en los estudios Capitol, uno de sus mejores discos. El resultado final fue un arreglo musical y una orquesta donde se percibía a la perfección el "Sonido Sinatra". Uno de los mejores temas incluidos en ese LP, Wrap your troubles in dreams, es interpretado aquí por Dean Martin, precisamente, en el show de Frank Sinatra. Atención al acompañamiento musical, puro Sinatra:
Frank Sinatra y Dean Martin en 1958, para grabar el LP Sleep warm de Martin
En la década de los sesenta, el show de Dean Martin despegó en los índices de audiencia. Un grupo musical de chicas, apodadas las Dingalings, acompañó a Martin y a Sinatra para darles un toque sesentero que, no sé muy bien si llegó a dar resultado:
 
 En 1965, Frank Sinatra fue el invitado especial, de nuevo, en el show de Dean Martin. Frank Sinatra interpreta aquí September of my years. Después se une a Dean Martin para hacer The oldest established para terminar un genial Witchcraft junto a la cantante Diahann Carroll:

viernes, 11 de mayo de 2012

Frank Sinatra y Marilyn Monroe: dos almas extraviadas, dos almas gemelas


Como si de una nebulosa se tratara, nadie puede precisar el primer encuentro entre Marilyn Monroe y Frank Sinatra pero, la más aceptada, es una cena en el famoso restaurante hollywoodense Romanoff's, en el año 1954. Aunque once años les separaban, dos de las mayores celebridades del siglo XX parecían destinadas a cruzar sus caminos. En algún momento, los dos fueron almas extraviadas, los dos, almas gemelas que se comprendieron, se aceptaron y sin más alarde, se amaron porque necesitaban consolarse o se consolaron porque necesitaban amarse. Aunque Marilyn siempre había sido admiradora incondicional de Frank Sinatra y de su música y solía acudir a sus conciertos, no fue hasta octubre de 1954, cuando la actriz rompió su matrimonio con el jugador Joe DiMaggio, que se acercó más amistosamente al cantante, quien también atravesaba su particular crisis con Ava Gardner. Se entendieron porque se necesitaban mutuamente. Ambos estaban destrozados por sus respectivas pérdidas y durante un tiempo, no hubo ningún contacto sexual, solo compañía, soledad compartida, juergas y comprensión.
Según palabras del actor y miembro de Rat Pack Joey Bishop, durante un concierto que Sinatra ofreció a finales de la década de los cincuenta, mientras él estaba realizando el monólogo de apertura, apareció entre el público Marilyn Monroe y todo el público, por supuesto, dejó de atender a Bishop. No quedaba un sitio libre en todo el local, así que le sacaron una silla y la instalaron en primera fila. Entonces Joey Bishop la miró fijamente a los ojos y exclamó: "Creí haberte dicho que me esperases en la furgoneta" Ella comenzó a reír como sólo Marilyn sabía hacerlo y gritó "¡que entre ya Franky"! Por aquel entonces ella y Sinatra iban juntos a todas partes pero raramente se dejaban fotografiar. A los amigos de Sinatra les parecía muy extraño que entre una de las mujeres más deseadas y el mejor cantante del momento no existiese más que una limpia amistad pero, en ese momento, ni Marilyn ni Frank necesitaban nada más. En cualquier caso, todo cambió durante una temporada larga (más de un mes) que la actriz pasó en casa de Sinatra. Durante la madrugada, Frank se despertó y fue a la cocina donde encontró a Marilyn compeltamente desnuda (como solía ir siempre por la casa) frente a la nevera, mordisqueándose el dedo meñique e intentando decidirse entre un zumo de naranja o un pomelo. "¡Oh, Frankie! No sabía que te levantaras tan temprano", exclamó Marilyn. Ese fue el final de cualquier amor platónico que hubiera entre ellos ya que, ese mismo instante, hicieron el amor contra la puerta de la nevera. Ese fue el principio de una larga relación íntima, llena de idas y venidas, de altibajos, de luces y sombras, pero que perduró hasta la muerte de Marilyn Monroe, en 1962.
Frank y Marilyn fotografiados en 1961

Frank y Marilyn se amaron de la misma manera. El cantante, según sus propias palabras, pensaba que era una mujer inteligente, ingeniosa, sexy y excitante. Marilyn creyó realmente que su destino era el matrimonio con Sinatra pero, quizá, esa fatídica noche de 1962 lo evitó para siempre. Y la única razón por la que Frank Sinatra no se tomó más en serio su relación con Marilyn fue porque, según él, todavía se sentía destrozado por culpa de Ava, era demasiado pronto y además, se había jurado no compartir su vida nunca más con otra actriz. Pero, en definitiva, ahí estuvo después Mia Farrow. Lo que a Sinatra realmente le fascinaba o le atraía de la actriz era su fragilidad, al igual que había sentido por Kim Novak o Judy Garland pero multiplicado por mil. Frank veía reflejadas sus debilidades, como en un espejo, cuando miraba a Marilyn.

Pero a pesar de que actriz y cantante acabaran teniendo una relación sólida, la actitud de Frank Sinatra, antes de intimar con Marilyn, fue desconcertante y una vez más, desafortunada. El cantante había fraguado amistad también con Joe DiMaggio, cuando este era el marido de Mariyln Monroe, según las malas lenguas, para acercarse más a la actriz. Una vez separados, DiMaggio se enteró que Sinatra alojaba en su casa a Marilyn, montó en cólera y retiró el saludo al cantante. Pero una noche del 5 de noviembre de 1954, antes de retirsarse el saludo mútuamente, DiMaggio telefoneó a Sinatra ya que, según sus informaciones, estaba pasando unos días en Hollywood. El jugador de béisbol necesitaba que Frank le acompañara al hotel donde estaba alojada, en West Hollywood, Marilyn Monroe. La intención de DiMaggio era sorprender a Marilyn teniendo relaciones sexuales con una amiga y así, reunir pruebas en contra para el proceso de divorcio. El problema fue que Frank Sinatra y Joe DiMaggio irrumpieron en la habitación equivocada, cámara fotográfica en mano y fueron demandados por una mujer de treinta y siete años que estuvo a punto de sufrir un infarto. La demanda fue de 200.000 dólares pero DiMaggio y Sinatra le pagaron, fuera de los tribunales, 7.500 y la mujer aceptó. Realmente Marilyn Monroe se hospedaba en ese mismo hotel, pero en el piso de arriba y estaba, efectivamente manteniendo relaciones sexuales, pero no con una amiga (aunque sí que lo hizo en repetidas ocasiones) sino con el pianista Hal Schaefer. Al final el asunto se solucionó casi sin repercusión mediática, aunque la revista sensacionalista Confidential sacó partido de la información tres años más tarde. Marilyn recordaría más tarde el incidente como "una mala pasada para Frank Sinatra, que se dejó llevar por DiMaggio".
Año 1962. Frank fue probablermente el último hombre al que Marilyn amó
Fue a finales de la década de los cincuenta, y a principios de los sesenta cuando Marilyn y Frank mantuvieron una relación más estable, basada en compasión mutua e intereses comunes. Incluso durante el matrimonio de Marilyn con Arthur Miller (que duró de 1956 a 1960), siguieron viéndose a escondidas. Los dos se hallaban en un mismo nivel de comprensión y podían pasar horas y horas hablando sobre literatura, arte o política. También en el terreno sexual, fue una pareja innovadora. En una ocasión, Frank, Marilyn y una mujer de color se encerraron en la habitación de un hotel para tener un encuentro sexual en grupo. Pero el trio no funcionó ya que, según Jimmy Withing (amigo de la pareja) la mujer de color y Marilyn empezaron a montárselo entre ellas y Frank se puso furioso. Otras veces, en mitad de una fiesta, solían desaparecer por alguna discreta puerta trasera para acceder a la azotea del hotel y hacer el amor a la intemperie, algo a lo que acabaron aficionándose. A principios de 1962 Marilyn contaba con treinta y cinco años y Frank Sinatra, cuarenta y seis. En febrero de dicho año, Marilyn que ya había terminado su relación con John Fitzgerald Kennedy, empezó un pequeño idilio con su hermano Robert, algo que nunca se llegó a demostrar y de lo que Frank nunca se enteró, ya que la actriz fue siempre muy reservada en sus relaciones con los Kennedy, a pesar de que todo había llegado gracias al cantante. En cualquier caso, Frank y Marilyn comenzaron a hacer vida social, iban juntos a todas partes, se hospedaban en la misma habitación, prácticamente eran inseparables. Sin embargo, pocas veces admitían que les fotografiaran juntos. En más de una ocasión, Frank acabó enfrentándose con los fotógrafos e incluso llegaban órdenes del propio Sands de Las Vegas (donde se organizaban la mayoría de las fiestas), de que se permitía fotografiar cualquier persona o habitáculo del hotel excepto al señor Sinatra junto a la señorita Monroe. Marilyn solía acabar todas las fiestas tambaleándose, borracha. Frank Sinatra en este aspecto, como ya hiciera con Judy Garland, le mostraba su desaprobación diciéndole que le molestaba profundamente su adicción al alcohol, a las pastillas y su fuerte naturaleza autodestructiva, algo que el propio cantante ya había experimentado en sus propias carnes.
Frank Sinatra y Marilyn Monroe en el yate del cantante
 En verano de 1962 Frank Sinatra inició su gira mundial benéfica All of God's children que terminó visiblemente afectado y tras romper su fugaz relación con Juliet Prowse retomó su relación con Marilyn Monroe cuya vida se hallaba sumida en el más absoluto caos y su carrera cinematográfica entraba una crisis definitiva. Tanto es así que Frank Sinatra consideró seriamente la idea de contraer matrimonio con la actriz. Además, ofreció un millón de dólares por los derechos de la película Nacida ayer (Born yesterday), para protagonizarla él mismo junto a Marilyn en el papel de Judy Holliday. Finalmente nunca se llevó a cabo el proyecto. Por aquella época la pareja pasó unos días en el yate del cantante, junto a otros amigos del Rat Pack entre los que se encontraba Dean Martin. El estado de Marilyn durante esos días en el mar era lamentable (como se puede advertir en las fotografías), pues no dejaba de beber en ningún momento. De hecho, Sinatra tuvo que pedirle que abandonara el yate y alojarla en un hotel del primer puerto donde atracaron.
Dean Martin, Frank Sinatra y Marilyn Monroe

Tras el incidente del yate, Marilyn Monroe acudió a pasar un fin de semana en la casa que Frank Sinatra tenía en Palm Springs. Ese mismo fin de semana, el cantante fue invitado a un almuerzo en la Casa Blanca, invitación que rechazó ya que Marilyn había salido de compras y había desaparecido. Frank estaba preocupado, no sólo por la seguridad de la actriz, sino por quién sería su compañía. En esta época, según el representante Milt Ebbins, Sinatra estaba realmente enamorado de Marilyn y le pidió matrimonio, abiertamente. Al parecer, en ese momento, Marilyn rechazó a Sinatra. Del 27 al 29 de julio, una semana antes de la muerte de Marilyn, la actriz se alojaba en el Cal-Neva Lodge, complejo residencial del que Sinatra era propietario, en el chalet número 25 Dos semanas antes, se rumoreaba que Marilyn había abortado pero, cuando Frank le preguntó por el tema, la actriz lo negó todo. Se supo que, durante su estancia en Cal-Neva, Marilyn alternó con su exmarido Joe DiMaggio (que se alojaba en otro hotel para esconderse de Sinatra) y con el gángster Sam Giancana. Apenas probó bocado, bebió todo lo que pudo y sufrió una intoxicación, una madrugada, en la que Sinatra montó en cólera. Según fuentes del servicio del Cal-Neva que realizaban servicio esa misma noche, Frank Sinatra llamó a los camareros del bar, desde la habitación de Marilyn y gritó "¡rápido, necesitamos café para el chalet número 25!" La escena que se vivió en la habitación de Marilyn debió ser algo semejante a la escena de El apartamento, cuando Jack Lemmon hace caminar a Shirley MacLaine, después de haber ingerido un bote de pastillas, solo que en esta ocasión, los protagonistas fueron Peter Lawford, Frank Sinatra y Marilyn Monroe, y no se trataba de ninguna película. El médico del Cal-Neva trató la indisposición de la señorita Monroe sin más informes médicos que una simple complicación estomacal. Esta fue la última vez que Sinatra vio a Marilyn Monroe. Al parecer, la noche de la intoxicación en el Cal-Neva, Frank Sinatra se quedó en la habitación de Marilyn. Al día siguiente, intentó animarla a empezar de nuevo, a sacar el máximo jugo a la vida. Pero Marilyn abandonó el Cal-Neva y Frank nunca más la vio. Pero el cantante relataría esa última conversación con Marilyn Monroe a Jilly Rizzo y Taraborrelli la plasmó en su libro Sinatra: A su manera:

-¿Para qué molestarme? No voy a estar aquí mucho tiempo, Frankie
- ¿De qué estás hablando? -preguntó Sinatra-
-Me iré muy pronto. Pero no te preocupes, Frankie. Vendré a verte, en tus sueños.