sábado, 24 de diciembre de 2011

Discos virtuales: Christmas songs by Frank Sinatra: un regalo de Navidad



1 Jingle Bells (16/ 07/ 1057)

2 Have yourself a merry little Christmas  (16 /07/1957)

3 I'll be home for Christmas (17/07/1057)

4 Let it snow, let it snow, let it snow (5/11/1950)

5 The Christmas song (con Nat King Cole) (17/07/1057)

6 Santa Claus is coming to town (28/12/1947)

7 The Christmas waltz (23/08/1954)

8 White Christmas (23/08/1954)

9 Whatever happened to Christmas (24/07/1968)


10 Silent night (16/07/1957)

11 An old fashioned Christmas (16/06/1964)

12 Christmas dreaming (26/06/1947)

13 O little town of Bethlehem (10/07/1957)

14 Christmas memories (29/10/1975)


Dean Martin y Frank Sinatra con sus respectivas hijas, en un especial navideño para televisión

FELIZ NAVIDAD A TODOS. NOS DESPEDIMOS HASTA EL 2012. QUE NO DEJE DE SONAR FRANK SINATRA EN VUESTROS HOGARES

martes, 20 de diciembre de 2011

Frank Sinatra clásico: Granada


Frank Sinatra siempre fue un admirador de la música clásica y de la ópera que solía escuchar asiduamente en su casa, en los poco momentos de tranquilidad que concedía a su frenética vida. Admiraba como a ningún otro, quizá por compartir raíces, al tenor Luciano Pavarotti e incluso llegó a grabar con él una versión de My way cuando Sinatra contaba con ochenta años, en 1995. Tras la muerte de Frank Sinatra, Luciano Pavarotti dijo: Era el Mozart de la música popular (es una frase que, por cierto, resalta el blog Razones locas, en una entrada dedicada a Frank Sinatra)



Los tres tenores también homenajearon a Sinatra, cantando para él My way en sus célebres conciertos de 1994:



Frank Sinatra nunca se dedicó, salvo en raras excepciones, a interpretar música clásica pero, en términos clásicos, sería considerado un barítono modernizado. Como muestra podríamos ofrecer este I have dreamed de la obra The king and I, una canción de corte clásico y de ejecución complicada:



Incluso, alguna vez, se atrevió a interpretar Granada, eso sí, en versión swing:

Ahora bien, por mucho que me ciegue la Sinatramanía, esta es la única versión de Granada que puedo escuchar. Con ustedes, el inimitable Plácido Domingo:

Frank Sinatra & Luciano Pavarotti

domingo, 18 de diciembre de 2011

Frank Sinatra canta, pero no quiere bailar: I won't dance (1957)

Sinatra en los cincuenta

Hace unas pocas entradas hablábamos del estupendo concierto de 1957 que se incluía en la última recopilación de Frank Sinatra: THE BEST OF THE BEST En este concierto Frank ataca la canción I won't dance. Y navegando por la red he encontrado este video de Frank Sinatra cantando la misma canción, precisamente en 1957. Sinatra la canta igual que en la grabación del disco original Come dance with me
y alarga la última nota, sosteniendo la palabra arms incluso hasta después de la orquesta, lo que levanta los aplausos del público:


I won't dance (Traducida)

No bailaré, no me lo preguntes
No bailaré, no me lo preguntes
No bailaré, Madame, con usted
Mi corazón no dejaría a los pies hacer lo que deben hacer


¿Sabes algo? Eres encantadora
¿Sabes algo? Eres maravillosa
Y, oh, ¡lo que provocas en mí!
Soy como la ola de un océano que se estrella en el puerto
Me siento absolutamente estrellado contra el suelo


Cuando bailas, eres atractiva yelegante
especialmente si bailas el Continental
Pero este sentimiento no es puramente mental
porque, por el cielo, no estoy enfermo

Y es porque
No bailaré, ¿por qué debería?
No bailaré, ¿cómo podría?
No bailaré, muchas gracias,
Sé que la música precede al amor
así que, si te tomo entre mis brazos, no bailaré.



Cuando bailas, eres atractiva yelegante
especialmente si bailas el Continental
Pero este sentimiento no es puramente mental
porque, por el cielo, que no soy de amianto

Y es porque
No bailaré, ¿por qué debería?
No bailaré, ¿cómo podría?
No bailaré, muchas gracias,
Sé que la música precede al amor
así que, si te tomo entre mis brazos, no bailaré.

Parece ser que con Grace Kelly no tenía problemas para bailar

I won't dance es una canción compuesta por Jerome Kern y Oscar Hammerstein II para el musical británico de 1934 Three sisters, Roberta para el cine.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Frank Sinatra sings to Kim Novak & I'll be seeing you

Frank grabando, en los cincuenta

Esta semana, más concretamente el pasado doce de diciembre, Frank Sinatra hubiera cumplido 96 años. También hace un par de domingos, aparecía este blog en El Periódico de Aragón, en un artículo del periodista Fran Osambela Navarro, que podéis leer aquí .  Para celebrar tanto acontecimiento quiero mostrar un divertido video en el que Frank Sinatra intenta cantar I could write a book a Kim Novak, pero Kim se lo pone realmente difícil:



Esto intentaba cantar:



Y ahora un número inolvidable: Frank Sinatra canta I'll be seeing you, compuesta por Sammy Fain e Irving Kahal. La canción pertenece al concierto de Sidney en 1961:


Kim Novak y Frank Sinatra. En la parte posterior podemos observar a Bogart y Bacall.

martes, 6 de diciembre de 2011

Frank Sinatra y la Mafia. Capítulo 4: Declaraciones ante el Consejo de Control del Juego en Nevada

Frank Sinatra recoge un premio humanitario en 1980, otorgado por una asociación promulgada por Grace Kelly. En la fotografía también aparece Gregory Peck.

Lavar la imagen y seguir jugando parecía uno de los grandes objetivos que obsesionaban a Frank Sinatra en 1980. Al solicitar una nueva licencia de juego en el estado de Nevada (licencia que había perdido en 1963 cuando el mafioso Sam Giancana provocó un sonado altercado precisamente en el Cal-Neva Lodge de Sinatra) tuvo que someterse a una exhaustiva investigación sobre toda su vida por parte del Consejo de Control del Juego. Según las leyes de Nevada, solo se puede adquirir dicha licencia por una persona "intachable, de carácter íntegro y honesto que no suponga una amenaza para el interés público". Sinatra estaba dispuesto a lavar completamente su imagen y desterrar todas las sospechas sobre sus vinculaciones con la Mafia. En aquella época el cantante estaba muy unido a los intereses políticos de los Reagan y había recaudado grandes sumas de dinero para la benificencia por lo que algunos creyeron que la licencia se le otorgaría independientemente de los testimoniso ofrecidos en las vistas orales. La Comisión del Juego de Nevada no tiene poderes para citar y por lo tanto, no pudo obligar a ciertos conocidos jugadores del hampa ni a colaboradores de Sinatra a declarar. Mickey Rudin, abogado de Sinatra, ayudó al comité a localizar las personas que podrían avalar el buen carácter del cantante, como Ava Gardner o Nancy Barbatto.  El 11 de noviembre de 1981 Frank Sinatra declaró en los despachos del Ayuntamiento de Las Vegas, acompañado por su mujer Barbara, Jilly Rizzo y varios abogados y publicistas. Ese mismo día, el amigo de Sinatra y sheriff de Los Ángeles Peter Pitchess declaró: "Si el señor Sinatra es miembro de la mafia, entonces yo soy el padrino". La vista fue emitida por la CNN y en ella declararon Gregory Peck, Kirk Douglas y Bob Hope dando fe de la generosidad y el espíritu benevolente de Frank en declaración jurada. El editor de Las Vegas Sun declaró que el incidente de 1963, en el Cal-Neva, no fue "nada más que una fuerte discusión" pero el abogado de Sinatra, Rudin, dejó zanjada la cuestión declarando que el FBI siempre había intentado "cazar" a Frank pero que gran parte de sus archivos no fueron más que insinuaciones y rumores sin consistencia. El plato fuerte del día fue la declaración jurada de Frank Sinatra, en la que, ataviado con gafas negras y traje, habló sobre su vida durante cinco horas y media. Entre sus declaraciones, las más jugosas fueron las referidas al capo Sam Giancana cuando afirmó que el mafioso nunca había sido invitado al Cal-Neva y nunca había tenido intereses financieros en su local. También declaró que Giancana no estuvo presente aquella noche de 1963 y que no recordaba cómo lo había conocido. Las últimas palabras de Sinatra sobre Giancana fueron: "Jamás tuve nada que ver con él en lo que a negocios se refiere y en contadas ocasiones tuve trato social con él. No existió ninguna conexión entre los dos." En cuanto al viaje que Frank Sinatra realizó hasta La Habana, para visitar a Lucky Luciano, declaró que solo fue a la isla para tomar el sol. La relación con los Kennedy, así como con el señor Gambino también salieron a relucir pero, en resúmen, el comité fue incapaz de apretar los tornillos a Sinatra sobre detalles importantes ni descubrir cualquier posible lapsus de memoria. Sin duda, esa noche de 1981, Frank Sinatra mintió sobre sus relaciones con los miembros del hampa pero consiguió que constara oficialmente lo que él y su familia querían que se dijera sobre él. En definitiva, lavó su imagen y obtuvo la licencia para poder volver a jugar y actuar en Las Vegas. 
Esta fotografía de 1978 estuvo a punto de causar unb apuro a Sinatra. En ella aparece junto a (de izquierda a derecha): Paul Castellano, Gregory DePalma, Frank Sinatra, Tommy Marson, los reconocidos mafiosos Carlo Gambino y Aladena Fratianno y Salvatore Spalotta. Sentados Joseph Gambino y Richard Fusco.


Después del juicio, Frank Sinatra también contestó algunas preguntas, en el descanso de un concierto, para la revista Hello! en abril de 1981:


- Frank, se comenta que si ha conseguido el permiso y no se han descubierto más cosas en el juicio es por su amistad con el nuevo Presidente Reagan, que le ha respaldado. ¿Qué hay de cierto?:

Frank responde:  ¡Nada! ¡Lo que se puede inventar la gente! Si me han concedido el permiso y no se han descubierto más cosas es porque simplemente no tienen nada que reprocharme. Todos mis negocios son honrados y si no se ha descubierto nada más, es porque no hay nada más que descubrir.
Frank Sinatra, Ronald Reagan y Nancy Reagan en la Casa Blanca

- Entonces, si está seguro de su honradez, ¿por qué ha esperado diecisiete años para dar este paso?


Frank responde: Bueno, te voy a ser sincero, porque estaba seguro de que si lo hacía en seguida no iba a ganar nada, porque todo el asunto estaba demasiado fresco. Y también porque la última vez, y sin razón, me prohibieron la entrada durante años. Luego estuve otros siete años más porque tenía mis otros negocios, mi carrera y , realmente, estaba algo resentido con aquella ciudad.


- Sigue teniendo sus otros negocios y su carrera ¿por qué quiere volver ahora?


Frank responde: Primero, porque me han ofrecido un gran contrato para actuar allí y después, que fue siempre una ciudad que me gustó y, por qué no, intentar otra vez hacer negocio.


- ¿Qué hay de cierto en esas declaraciones de Frattiano en su autobiografía?


Frank responde: Pues exactamente, como se ha demostrado en el juicio, nada en absoluto. Yo no niego que conocía a Aladena, a Giancana, pero yo no sabía que eran miembros de la mafia y por supuesto, no he hecho ningún negocio. Eran clientes y nada más. Lo de Willie Moretti es falso total. Jamás me ha ayudado en mi carrera y además, solo le había visto un par de veces porque éramos vecinos, nada más. Cuántas veces ha ocurrido que estés vivendo en una casa con unos vecinos que a todos parecen normales o tener unos amigos y a la hora de la verdad te enteras que era ladrón, asesino, drogadicto o cualquier cosa. Y no porque les hayas hablado tienes que ser igual que ellos.


- ¿Pero no cree que su amistad con el presidente Reagan, aunque él no haya hecho nada, ha podido influir?


Frank responde: ¡No! Esos jueces eran muy duros, no se quedaban a gusto con nada y volvían a las mismas cosas cuatro o cinco veces; digo yo que será para ver si me contradecía y no dejaron pasar nada. Además, mi amistad con el Presidente es relativa. He actuado en su campaña y le he preparado algunas apariciones, pero ahora él es el Presidente y yo sigo siendo un cantante y tiene otras preocupaciones más importantes que ocuparse de mí. Mantenemos cierta distncia.
Graciosa escena de baile en la Casa Blanca. Ronald Reagan solicita a su esposa para la próxima canción

- Parece ser que estaba muy emocionado con la actuación de Gregory Peck y Kirk Douglas


Frank responde: Por, supuesto, estos son amigos. Jamás olvidaré su apoyo y su ayuda.
Kirk Douglas y Frank Sinatra en una fiesta country en la década de los sesenta



- ¿Cuándo se traslada a Las Vegas?


Frank responde: A mediados del mes que viene iré a echar un vistazo.

- ¿Cree que la Comisión de Control le concederá el permiso definitivo?


Frank responde: No puedo hablar de nada fijo, pero yo creo que sí, yta que dejé todos los puntos bien claros.


- Pues nos alegramos de que haya sido sólo un mal momento y muchos éxitos, Frank


Frank Sinatra: Gracias, un beso!


Esta entrevista se publicó en el número de abril de la revista Hola de 1981.


Y después de toda esta historia, el apabullante comienzo de uno de los mejores conciertos que ofreció Sinatra, desde el Madison Square Garden, The Main Event:

The lady is a tramp:

I get a kick out of you:

sábado, 26 de noviembre de 2011

SINATRA: BEST OF THE BEST ¿Otra recopilación más?


Durante el mes de noviembre ha salido a la venta en el mercado europeo el último recopilatorio que intenta albergar las mejores grabaciones de Frank Sinatra. Este Sinatra: best of the best contiene lo mejor de los años con Capitol Records y lo mejor de los años con Reprise, pasando por alto la primera época de los años cuarenta y la etapa con Columbia Records. Aún con todo, el sonido que se ofrece de las grabaciones con Capitol es, sin llegar a la excelencia del vinilo, impecable. Atrás quedaron en el olvido los años en que las remasterizaciones para el CD digital enmudecían a la orquesta o restaban profundidad a la voz de Sinatra. Ahora, en esta recopilación, podemos disfrutar de un One for my baby como recién sacado del estudio de grabación, pudiendo distinguir la respiración de Frank e incluso el leve carraspeo antes de ejecutar una determinada frase que debe sonar extremadamente suave. Así, en este nuevo recopilatorio, se ofrece un sonido espectacular de la grabación original de Come fly with me, All the way o Young at heart En el apartado de las grabaciones con Reprise podremos encontrar más de lo mismo, es decir, Theme from New York, New York, My way, Strangers in the night, That's life o Somethin' stupid. Desde este punto de vista el recopilatorio es esencial para todo aquel melómano que nunca haya comprado nada de Frank Sinatra. Sin embargo, para los que llevamos años escuchándolo este CD sería totalmente prescindible. Pero la sorpresa para los Sinatradictos llega con la edición especial de Sinatra: Best of the best en la que, además de una elegante presentación y algunas fotografías de coleccionista totalmente inéditas, podemos encontrar un concierto también inédito grabado el 9 de junio de 1957 en Seattle, junto a la orquesta de Nelson Riddle. Realmente este concierto es una joya. Estando grabado en 1957, sin embargo, su sonido es limpio y plenamente satisfactorio. Pero la mejor cualidad reside en el repertorio que Frank Sinatra ofreció para este concierto. Es un regalo para cualquier Sinatrista poder disfrutar de las versiones en directo de los clásicos Violets for your furs, Oh! look at me now, I won't dance, Glad to be unhappy, When your lover has gone, A foggy day, Hey jealous lover, It happened in Monterey o The tender trap. Todos estos temas, poco habituales en los conciertos de Sinatra, se interpretan aquí con el mismo arreglo que se grabaron en los estudios Capitol, con los mismos músicos y con una orquesta insuperable, un directo perfecto. En 1957 Frank Sinatra era la mejor voz del momento y en este concierto de Seattle ofrece lo mejor de sí mismo, en mi opinión, la mejor época de Frank Sinatra como vocalista. No disponemos de imagenes de ese concierto pero, para que nos hagamos una idea, veremos la canción Lonesome road cantada por Frank Sinatra el mismo año 1957. Depués veremos una versión en directo de I won't dance, en la década de los ochenta, una versión de los cincuenta de Oh! look at me now, en al que Sinatra cambia totalmente la letra y para finalizar una parte de la canción Violets for your furs incluida en un Medley que Sinatra cantó en uno de sus shows de la década de los sesenta.

Lonesome road (1957):


I won't dance:



Oh! look at me now



Last night when we were young Medley (Violets for your furs)


1957 fue el mismo año que Frank Sinatra grabó el tema The lady is a tramp o All the way y también fue el año que protagonizo la película Pal Joey. Sin duda, un gran año para Sinatra.

lunes, 21 de noviembre de 2011

CBS: Sinatra, The Legend.

Sinatra, the legend

El documental que CBS emitió el 21 de mayo de 1998, titulado "Sinatra, the legend" Merece la pena verlo.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Bewitched (1980) y Frank Sinatra fotografiado por Herman Leonard

Frank Sinatra en el estudio de grabación (1956)
 El recientemente desaparecido fotógrafo Herman Leonard (Pennsylvania 1923, Los Angeles 2010) fuye uno de los indiscutiblemente más sobresalientes retratistas del jazz y el blanco y negro. Ante su cámara posaron Billie Holiday, Charlie Parker, Dexter Gordon, Ella Fitzgerald, Duke Ellington, Miles Davis, Lionell Hampton, Marlon Brando, Louis Armstrong o Tony Bennett. Sus fotografías forman parte ya de la historia del siglo XX y Frank Sinatra también estuvo incluido, en repetidas ocasiones, en su colección. Además de la fotografía de cabecera, veremos otras en las que Herman Leonard inmortalizó a Frank Sinatra:
Frank Sinatra en Montecarlo (1958)
Frank Sinatra 1956

Frank Sinatra en el estudio Capitol (1956)
Frank Sinatra en el estudio Capitol (1956)


A continuación escucharemos Bewitched, interpretada en el estadio de Maracaná, Río de Janeiro, en 1980. De esta manera y con estas fotografías conmemoramos el aniversario del matrimonio entre Ava Gardner y Frank Sinatra, celebrado en noviembre de 1951

Maracana Stadium (26/01/1980)


Bewitched - M/80 por Franklyjoy22

sábado, 5 de noviembre de 2011

Frank Sinatra: una noche con swing en Sidney, Australia; "Day in, day out" y "I concentrate on you" (1961)

Frank Sinatra ensayando antes del concierto


En la gira mundial que Sinatra realizó en 1961 visitó lo que comenzaba a ser, en los sesenta, el segundo paraíso para los casinos y para los saloon singers: Sidney. Y hasta allí llevó su mejor sonido, su mejor swing de siempre, para encantar al público australiano con una banda perfecta. Escucharemos Day in, day out y I concentrate on you donde es de vital importancia prestar atención al fraseo de Frank y las variaciones sobretodo en el segundo tema donde, más que cantar, juega con la melodía.

Day in, day out:

Day In, Day Out - S. 61. por Franklyjoy22
I concentrate on you:

I Concentrate On You - S.61 por Franklyjoy22
Como rareza escucharemos la grabación de Stardust en el sonido directamente del estudio, también de 1961:

Stardust - AT' 61 por Franklyjoy22

domingo, 30 de octubre de 2011

When you're smilin' (Frank Sinatra. Octubre 1950)


Creo que Sinatra estará siempre presente como un referente musical permanente del siglo XX. Desde luego, si contamos con la blogosfera, Frank Sinatra está cada día más de moda y así lo podemos encontrar en este texto de Francisco Machuca o también en los pasadizos del loser de Juan Herrezuelo. Por supuesto, también hay que mencionar el rincón del Rat Pack de Javier Márquez y el Ol' blue eyes is back de Silvia. Me alegra ver que Sinatra no sólo es utilizado en bandas sonoras de películas romanticonas a las que se les quiere dar un toque de clase o como objeto de imitación, tal y cómo ocurrió en el programa Tu cara me suena de Antena 3 donde Santiago Segura intentó cantar sin éxito I've got you under my skin. Frank Sinatra, como digo, siempre estará presente en la historia de la música. En octubre de 1950 se publicó el LP de diez pulgadas Sing and dance with Frank Sinatra con nuevas grabaciones del, por aquel momento, ídolo de masas de 35 años de edad donde se incluían Lover, It's only a paper moon, My blue heaven, It all depends on you, You do something to me, Should I ?, The Continental y la que veremos a continuación, la alegre When you're smiling. Si bien es verdad que, a partir de este LP, Sinatra viviría su peor momento en la industria musical y cinematográfica cayendo por completo en el olvido hasta que llegó De aquí a la eternidad.

Frank Sinatra - When You' re Smiling por kamatrikero

Portada "Sing and dance with Frank Sinatra" publicado en octubre de 1950
Sin duda, uno de los mejores LPs que se pueden rescatar de Frank Sinatra.

Por cierto, por si se perdieron la imitación de Santiago Segura, en la página oficial de Antena 3 aparece: aquí Al menos han tenido la decencia de colgar la versión original a la derecha del video.

domingo, 23 de octubre de 2011

Un tipo de cuidado (por Juan Herrezuelo)

Frank Sinatra, caricaturizado por Juan Herrezuelo

El escritor Juan Herrezuelo, autor de Pasadizos, El veneno de la fatiga o Desde el lugar donde me oculto me ha enviado, a petición mía, un texto titulado Un tipo de cuidado. Esta entrada está encabezada por una muy acertada caricatura que Juan realizó sobre Frank Sinatra


UN TIPO DE CUIDADO

Acodado en la barra de un bar elegante, Dave Hirsh, el personaje que Frank Sinatra interpreta en la película Como un torrente, de 1958, intenta explicar por qué ha abandonado la literatura: “Un poco de talento en un escritor es como un poco de talento en un cirujano del cerebro”. La refinada intelectual que está su lado le recuerda que hay dos libros suyos en la biblioteca de la ciudad, y Dave responde que le reportaron exactamente cuarenta y ocho dólares. “Supongo que también alguna satisfacción”, dice ella. “”, responde él, “por valor de cuarenta y ocho dólares”. 
Duros pero sentimentales, aficionados ambos al juego, la bebida y las mujeres, Hirsh y Sinatra difieren sin embargo en algo esencial: Sinatra nunca dudó de su talento. Hubo una época oscura, es cierto, a comienzos de los cincuenta, cuando después de una década gloriosa todo parecía indicar que su estrella como cantante y actor estaba condenada a apagarse, pero fue precisamente la seguridad en sí mismo, su correosa tenacidad (y la proverbial intervención de Ava Gardner entre bastidores, claro está) lo que hizo posible una de las resurrecciones artísticas más legendarias del mundo del espectáculo. Su premiada interpretación del soldado Angelo Maggio en De aquí a la eternidad (1953), papel por el que peleó duramente sabiéndose en el filo del olvido, supuso un nuevo y definitivo impulso a su carrera. El resto ya forma parte de la Historia.
El secreto de la permanente admiración que despierta Sinatra, hoy como ayer, radica tanto en sus privilegiadas dotes vocales como en un magnetismo que resulta del todo inaccesible para quien ha tenido la tentación de imitar su estilo. Cuando canta, Sinatra dialoga, se sincera, seduce, pero al mismo tiempo te deja intuir que en todo ello hay una irresistible mezcla de franqueza y bribonería: tres ejemplos de su intensa capacidad de seducción: el You’re Awful con que obsequia de manera deliciosamente equívoca a Betty Garrett en lo alto del Empire State (Un día en Nueva York, 1949); ese You’re Sensational dirigido a una aturdida Grace Kelly que, a punto de convertirse en princesa de Mónaco, desliza sus dedos por el borde de la copa de champán con distraída sensualidad (Alta sociedad, 1956); y mi número favorito, una provocadora osadía al más puro estilo Sinatra para hacerle saber a Rita Hayworth, con el local ya cerrado, que The Lady is a Tramp, (Pal Joey, 1957). 
Sus facultades naturales como actor, sin duda alguna las más notables que haya poseído cantante alguno, determinan que cuando en su caso hablamos de “interpretar” unas canciones lo hagamos en el más amplio y persuasivo sentido del término: nos muestra, sin aparente esfuerzo, desde la candidez del joven romántico al implacable atrevimiento del conquistador y el granuja, de la melancolía que nace en el desengaño y la derrota al  cinismo de quien está de vuelta de todo. Éste es, posiblemente, el secreto de su universalidad más allá del hecho de que se trate de una música esencialmente norteamericana y de unas historias cantadas en un idioma que no conocemos: el instrumento lleno de matices que es su voz y la expresividad con que lo hace sonar propician idéntica complicidad en cualquier cultura. “Era el Mozart de la música popular”, dijo Pavarotti a su muerte. Es decir: no se puede ni se podrá alcanzar mayor altura en su estilo.
Recolocándose decididamente el gorrito de marinero sobre la frente mientras espera que la chica abra la puerta; ensayando con aceitunas una jugada de dados en la barra de un bar de Honolulu, borracho y sin que parezca importarle haber abandonado la guardia en el cuartel; tiritando horriblemente en lo más duro de un mono de heroína; organizando timbas clandestinas en los salones del Ejército de Salvación; esperando, con un rifle de mira telescópica montado en la ventana, la llegada del Presidente a la estación de un pequeño pueblo; caminando resignadamente por una calle de Las Vegas, acompañado de todo el clan, tras haber asistido a la incineración del botín obtenido en un golpe perfecto; intentando torpemente encender un cigarrillo en un vagón de tren mientras, con el rostro empapado de un sudor frío, intenta comprender qué significa esa sospecha de que algo ocurrió en Corea cuando él y sus hombres fueron hechos prisioneros, algo terrible que sin embargo no alcanza a recordar... Sinatra es creíble en todos sus papeles sin necesidad de convertirse en el personaje ni metabolizar sus más profundas (y ficticias) motivaciones. No. Sinatra acoge al personaje en su pellejo e intuitivamente le hace moverse en la historia.
¿Un vividor? Seguro que sí, y una parte de su atractivo se debe a ello (“Sólo se vive una vez, y del modo en que yo vivo, una vez es suficiente”, dijo. ¿Quién podría suscribir una afirmación como ésta? ). Pero no cabe la menor duda de que era un profesional que se tomaba su carrera en serio: grabó entre mil doscientas y mil trescientas canciones, intervino en casi cincuenta películas y dio un número presumiblemente muy elevado de conciertos. ¿Se divirtió haciéndolo? Apuesto a que la mayor parte de las veces, pero eso no significa que no se tratase de trabajo. Y por si alguien pensaba que la suya era una vida en la que cualquiera podía hurgar a su antojo, en su casa de Palm Springs colocó un letrero que decía lo siguiente: “No hagan caso del perro. Cuidado con el amo”. Yo no me hubiera tomado a la ligera la advertencia.

Juan Herrezuelo


sábado, 8 de octubre de 2011

Frank Sinatra en el cine: Young at heart (Gordon Douglas. 1954)

Frank Sinatra como Barnie Sloan en Young at heart

Pasa desapercibido y sin duda, el papel que Frank Sinatra realiza para el musical Young at heart, como el atormentado compositor Barnie Sloan, es más que loable. Young at heart es un remake de Four daughters (Michael Curtiz. 1938) y puede considerarse dentro del género melodramático. Alex Burke (Gig Young) es un apuesto compositor que llega a la casa de la familia Tuttle para terminar de arreglar una obra teatral donde participará cada miembro de la familia, siempre muy ligados con la música. Las tres hijas Tuttle se enamoran de Burke pero Laurie (Doris Day) es la que acaba comprometiéndose con él. Burke necesita ayuda para terminar algunos arreglos musicales de la obra y en consecuencia, llama a su viejo amigo Barnie Sloan (Frank Sinatra) quien  también recala en casa de los Tuttle. Sloan es un hombre atormentado al que, según cree firmemente, el cielo se la tiene jurada y por eso la mala suerte es la tónica constante de su mediocre vida. Apenas tiene trabajo, no tiene dinero y el único encargo que ha recibido en los últimos años ha sido el de su amigo Alex Burke. He aquí que el personaje de Sinatra se las ingenia para coneguir que Laurie Tuttle rompa su compromiso con Burke y termine contrayendo matrimonio, más por lástima que por otro motivo, con él. Pero, a pesar de haber conseguido casarse con Laurie, Barnie no se considera digno de ella ni se siente seguro de poder hacerla feliz. Es así, como en una navideña noche de nieve, decide intentar quitarse la vida interrumpiendo el funcionamiento del parabrisas y acelerando en la carretera. Pero aquí no termina la película. Para averiguar el final será más conveniente su visionado.
Laurie Tuttle (Doris Day) y Barnie Sloan (Frank Sinatra)
¿Lo mejor de la película? Sin duda, las canciones. En 1954 Frank Sinatra goza probablemente del mejor momento de su carrera musical y de la mejor voz. En la película canta una versión previa a la que grabó con Capitol tres años después del tema One for my baby, otra versión alternativa de Just one of those things, Someone to watch over me y por supuesto nos deleita con el tema principal compuesto por Johnny Richards y Carolyn Leigh titulado Young at heart, todo un éxito de su etapa Capitol. También cabe destacar de esta película la interpretación de Ethel Barrymore (como siempre, estupenda) como la tía Jessie y de Dorothy Malone en el papel de la hermana mediana, Fran Tuttle.
A continuación, algunas de las canciones que suenan en la película. En algunas canciones sólo puedo poner enlace por poseer copyright

Just one of those things:


You, my love

Trailer:


Young at heart cantada en 1965:


Someone to watch over me (1978)

sábado, 1 de octubre de 2011

We'll be together again, Frank Sinatra para una de estas noches

Frank Sinatra circa 1956

Una de mis baladas favoritas, una de esas nocturnas, con premeditación y alevosía, en la discografía de Frank Sinatra está incluída paradójicamente en uno de sus álbumes que contiene el swing más explosivo, el Songs for swingin' lovers. La canción We'll be together again, compuesta por Fischer y Laine, fue grabada el 16 de enero de 1956 con la orquesta de Nelson Riddle que también acompaña a Sinatra en esta espléndida actuación del mismo año 1956. Disfrútenla, si puedes ser, de madrugada:

jueves, 15 de septiembre de 2011

Frank Sinatra en La Caja de Pandora

Frank Sinatra en El hombre del brazo de oro
Probablemente la mejor actuación en el cine de Frank Sinatra fue en 1955, a las órdenes de Otto Preminger, en The man with the golden arm y la adicción a las drogas de su personaje protagonista, Franky Machine. En el número dos de la revista digital La Caja de Pandora hablo de esta película, cómo Sinatra consiguió el papel y cómo lo ejecutó. Ahora les dejo con el trailer de The man with the golden arm, película muy recomendable si es que no la han visto.




El personaje de Sinatra (Franky Machine) en plena crisis

domingo, 11 de septiembre de 2011

Frank Sinatra canta September of my years en el show de Dean Martin


Inevitablemente cuando se intenta profundizar en la música de Frank Sinatra, en su discografía y no limitarse a sus famosas My way, Strangers in the night o NY-NY, se advierte el secreto de su éxito, la clave de una voz incomparable que perdurará a lo largo de los tiempos. Parte de ese enigma se descifra al entrar en el juego. Y se entra en el juego cuando se escucha la historia que en cada canción nos cuenta Sinatra, una historia que en la mayoría de los casos nos llega como si fuera autobiográfica. Añadiendo a esta particularidad la depuración total en la técnica del canto podemos llegar a comprender por qué Sinatra está en ese lugar que solo le corresponde a él, por méritos propios. September of my years, un temazo compuesto por Sammy Cahn y Jimmy Van Heusen, es una de esas canciones que transmiten a la perfección ese secreto en la sincera voz de Sinatra. Aquí, en el show de Dean Martin, interpreta este tema y At long last love. Después, junto a Dean Martin, canta The oldest established y Witchcraft junto a Dino y Diahann Carroll.



 

Video publicado también en el otro blog El sueño eterno, para celebrar unos poemas septembrinos


September of my years

Un día te despiertas y es verano
Al día siguiente, sin darte cuenta, es otoño
Y de repente, todas las primaveras y los inviernos de una vida...
¿qué ocurrió con todos ellos?

Como el hombre que pasa la vida caminando errante
ahora contemplo el pasado
hasta que un montón de amores olvidados aparecen

Y me sorprendo suspriando suvamente cuando estoy cerca
de septiembre, el cálido septiembre de mis años.

Como ese hombre que nunca se ha detenido a lanzar un deseo
ahora estoy contemplando los tíovivos de los niños
y su risa es música para mis oídos

Y me sorprendo sonriendo agradablemente cuando estoy cerca
de septiembre, el cálido septiembre de mis años
el dorado y cálido septiembre de mis años


Entrada dedicada a Juan Herrezuelo al que le gustó especialmente September of my years

martes, 6 de septiembre de 2011

Septiembre, el mes preferido de Frank Sinatra

Frank Sinatra en una imagen de archivo que sirvió para la portada del LP "Come dance with me"


Ha llegado septiembre. Probablemente, el mes favorito de Sinatra. No sólo le dedicó un Lp entero (September of my years), es el escenario ambiental de una de sus mejores canciones (It was a very good year) y es protagonista de su hit September in the rain. Septiembre es la llegada del otoño. Septiembre es la pérdida del ser amado, el desamor que empapa todas y cada una de las grabaciones que Sinatra realizó en trabajos tan memorables como Where are you, No one cares, In the wee small hours of the morning, Only the lonely o Point of no return; grabaciones que él realizó como ninguno. Probablemente porque Sinatra es la mejor voz para transmitir el otoño. Sinatra es otoño: melancolía, trsiteza, barra de bar solitaria, madrugada, humo de tabaco, whiskey sin hielo.

Hoy, para la primera entrada septembrina del blog dedicado a Sinatra, escucharemos September song cantada por él mismo junto a Bing Crosby. Admirable el trabajo de Crosby haciendo la segunda voz para que Sinatra ejecute el final natural de la composición. Crosby, desde los tiempos junto a las Andrews Sisters, siempre fue un genio de la "segunda voz".

Frank Sinatra & Bing Crosby por soulpatrol

Por último, disfrutaremos de September in the rain, otra canción que ofrece un lado más amable de septiembre, quizá más cerca del verano que se acaba que del otoño solitario:


miércoles, 31 de agosto de 2011

Frank Sinatra censurado y un poema de Rod McKuen





El comportamiento social de Frank Sinatra se separaba con una delgada línea de lo que en Estados Unidos de los cuarenta y los cincuenta era considerado ilegal. Estuvo fichado por la policía debido a un altercado en un restaurante  con un periodista, era un juergista empedernido  y las insinuaciones sexuales, al cambiar la letra de sus canciones en los conciertos, iban demasiado lejos. Pero la censura no tardó en llegar a los éxitos de Sinatra. El 6 de noviembre de 1953 Frank Sinatra grabó, junto a la orquesta de Nelson Riddle, el tema de Cole Porter I get a kick out of you. Aunque en esta canción se alude a la cocaína para minusvalorarla frente a la pasión que siente por la supuesta chica, receptora de la letra, Sinatra tuvo que cambiar la frase a mediados de los cincuenta para cantar en sus conciertos “Me gusta el perfume de España” en lugar de la frase original: “A algunos les va la cocaína” En la década de los sesenta, definitivamente, volvió a grabar I get a kick out of you suprimiendo la frase en la que se nombra la cocaína por la del perfume de España.
Fue en la década de los cincuenta, también, cuando Frank Sinatra fue declarado persona non grata en nuestro país y Francisco Franco prohibió su entrada en él. Frank solía bromear con Grace Kelly diciendo: “eres dueña de un país mientras que yo sé de algunos a los que ni siquiera puedo entrar” Pero no fue esta la única vez que Sinatra fue censurado en España. De hecho, el cantante, llegó a creer que Franco estaba obsesionado con prohibirlo. Cuando apareció en nuestro mercado el LP A man alone lo hizo con una canción menos que el original. El tema The beautiful stragers fue censurado. La canción está dedicada por Sinatra a todas aquellas maravillosas desconocidas con las que compartió unas horas de amor en la habitación de algún hotel. Este corte fue eliminado de la edición española en vinilo del sello Hispavox debido a la vigilante censura franquista. Tan solo un episodio más en el salvaje hermetismo con que sometió Franco a una sociedad española que estuvo a punto de morir ahogada si no es que lo hizo definitivamente. Parece increíble que una letra tan inocente, un disco tan memorable y de una calidad musical tan depurada, no pudiera pasar la censura franquista. De todas maneras, es así como el público de nuestro país, bajo la dictadura, fue ajeno a cualquier obra cultural que se realizaba en el extranjero. The beautiful strangers fue grabada el 20 de marzo de 1969.
Frank Sinatra observa a Rod McKuen, en el estudio

El LP A man alone, que ya revisamos con detenimiento aquí en una entrada anterior, está compuesto por poemas de Rod McKuen, musicalizados,  escritos especialmente para ser cantados o recitados por Sinatra. Pero McKuen escribió un poema dedicado a Frank Sinatra que no está incluido en el LP y solo apareció en el interior de la versión norteamericana. En él intenta explicar la compleja personalidad de Sinatra a través de sus versos. A continuación el poema de Rod McKuen, traducido, titulado Frank Sinatra, una valoración:



Corriendo
        o
      d
     n
    a
   t
  l
 a
s
quedándose quieto,
Frank Sinatra es el hombre más alto que conozco.
Sentado
   sus pies atraviesan las nubes,
y en cualquier caso una noche le escuchamos cantar
Fly me to the moon desde la luna.
Después de eso
incluso aunque le llames Frank
te preguntas si algún día te ganarás el derecho
    a hacerlo.
Es alto porque se agacha para ayudar
   y se dobla para dar,
y porque mientras iba por su camino
siempre ha tenido tiempo
para quitar la maleza
para aquellos que vinieron detrás de él.
En ocasiones cae al darse la vuelta
y no hay nadie para recogerle, salvo él mismo,
    Siempre se levanta
más alto de lo que era el día anterior.
Al conocerle por primera vez
sabes que puede atravesar un muro
    con sus ojos.
Después te enteras de que está demasiado ocupado
   construyendo puentes como para pensar en la destrucción.
Aun así estás alerta.
¿No es este el hombre sobre el que has leído
que pega a la prensa
y devora sombras
como un martillo neumático mordiendo las calles?
    Ten cuidado.
Entonces sonríe.
No sé como quién.
Como nadie lo ha hecho no lo hará.
Te marchas esa primera vez pensando
que quizá ya no quieras escribir canciones
para nadie más que para él.

Otra vez
te lo encuentras y habláis de trenes
   y de Alec Wilder.
Bebéis mucho.
Ya de madrugada
él se queda escuchando a Respighi
mientras tú te arrastras hacia tu cama.
Te preocupa porque tiene tanto
    (y no me refiero a aviones)
y él piensa que tiene tan poco.
¿Qué le puedes dar a un hombre
que le ha dado tantos mundos de placer
   a tanta gente?
El periódico de la mañana.
¿Pero eso no le dejaría al portero
sin ese honor diario?
¿Cuántos Frank Sinatras conozco?
   Uno cada día.

Aquel cuya delicadeza con las mujeres
roza modales renacentistas.

Creo honestamente
   que no ha conocido aún a ninguna mujer
      que creyera que es una perdida.

Ahí está el hombre de familia
preocupado por sus niños.
Ayudando, nunca presionando.
(gracias a Dios que su hijo no
Hace discos para Reprise).
Él es el padre
que esperó hasta que su hija mayor
triunfara por méritos propios
para cantar una canción con ella.
  El único hombre
   que ha hecho que esa cara risueña
      sonriera constantemente.

Tina ha perdido su equipaje
camino a Bangkok,
así que se tira todo el Día de la Independencia
llamando a aeropuertos de todo el mundo.
¿El luchador?
  Hmmm.
¡Jesús, el público puede ser malvado!
En una noche en la ciudad
he visto que le han provocado
media docena de veces.
    Sonreía y firmaba con su nombre
Nadie se ganó una nariz sangrante
o su foto en The Daily News.
Pero a mí
   me preocupaía ver sus ojos girar hacia el naranja,
aunque sea su color favorito.

Aun así te quedas con la impresión
   de que en la duda
prefiere darse una paliza a sí mismo.

Quién más se va a casa a Hoboken
y vuelve a Califronia
dos días y veinte millones después.
Así que es un hombre de negocios.

(Recuerda eso y olvida
sus dos Oscar, no uno)

Agallas debería ser su segundo nombre,
   No albert.
A veces pienso que inventó las agallas
   de arriba abajo.
Cuando le oyes anunciar a los 50
“septiembre es una edad estupenda”,
te das cuenta de los abismos generacionales
que ha juntado con sus propias manos.
   Aun así algo
(quizá las glándulas de mono)
le ha conservado más que joven de ciorazón.
Su cabeza es tan nueva como el mediodía de mañana.
¡Ya lo tengo!
Jack Daniels le puso en conserva
allá por 1943.
¿Pero por qué canta mejor cada día?
¿Por qué hay nuevos ciclos humildes
y ese orgullo que anuncia que lo hice A mi manera?
Lo hizo, ¿sabes?
Así que cada uno de nosotros
lo hace la manera suya para demostrarlo.

Él inventó el canto,
y cada vez que canta
da lecciones.
Se reduce a esto.
Sea el tipo de hombre que sea,
quien sea que nos creó
   sólo creó a uno como él.
Tienes que quererlo.
Dejo que tú decidas las razones.
Yo he colocado algunas de mis razones
dentro de las palabras y la música que hay aquí
y Frank Sinatra canta esas canciones con amor.
Casi como si fueran de su propiedad.
   Supongo que es así, maldita sea.
Como cualquiera que marche al ritmo de su propio tambor,
Sinatra es un hombre solo.
A veces creo que se ríe
por no llorar.

Olvídalo.
No soy Sigmund Freud.
Sólo sé unas pocas cosas.
Hoy conozco a un hombre
que se esconde en las colinas de California
que se ha echado definitivamente a perder
porque otro hombre al que quería
le ha dado nuevas dimensiones a sus hijos.
Mis hijos son mis canciones
y todas las que están en este álbum
tienen resplandecientes zapatos nuevos.

(Rod McKuen. Junio, 1969)

En el siguiente video, que ya vimos aquí pero que no me canso de repetir, Frank Sinatra recita el poema Out beyond the window de Rod McKuen, incluido en A man alone y canta la canción que da nombre al disco.



En primer término Frank Sinatra. Al fondo Rod McKuen. Fotografía de estudio, 1969