miércoles, 29 de enero de 2014

South of the border! Frank Sinatra, detenido en Torremolinos

Frankie's Cafe, el bar del Hotel Pez Espada, de Torremolinos (Málaga)
Cuando hoy caminamos por el Hotel Pez Espada de Torremolinos (Málaga) su ambiente parece querer remitir a los viejos años de gloria en que la estancia era habitada por estrellas de Hollywood y personajes famosos de la época. Sensación reforzada a la hora de entrar en el Bar del hotel. Allí, toda la decoración nos remite a Frank Sinatra y los cócteles tienen el nombre relacionado con algún aspecto de la vida del cantante. De hecho, el propio local se llama Frankie's Cafe Y es que en 1965 un Frank Sinatra de 49 años estuvo rodando la película Coronel Von Ryan (Mark Robson. 1965) cuyos exteriores se filmaron en Europa. El rodaje de esta película fue especialmente escabroso en lo que a la vida sentimental del cantante se refiere. En septiembre de 1965 rodaron exteriores en Italia, al mismo tiempo que Ava Gardner rodaba también exteriores para La Biblia de John Huston, en la misma zona del país. La prensa sensacionalista sacó tajada de la noticia y creaban de la nada titulares como "Los belicosos Sinatra coinciden en la misma ciudad, en diferentes películas" Los fotógrafos de la prensa italiana ofrecieron 160.000 liras a Frank Sinatra por una sesión de fotos junto a su ex mujer. El cantante dobló la cantidad a cambio de asestar unos cuantos directos a los paparazzi. No llegaron a ningún  acuerdo. De hecho, probablemente Ava y Frank no se vieron las caras en toda su estancia en Italia. Por aquel momento Ava Gardner estaba demasiado interesada en su compañero de reparto George C. Scott, con quien mantuvo otro tormentoso idilio a pesar de que era un hombre casado. O precisamente por ello. Pero, también durante este rodaje, Frank Sinatra conoció por accidente a Mia Farrow. Fue anteriormente, en octubre de 1964 cuando, por error se coló en el estudio de la Twenty Century-Fox donde coincidió, cara a cara, con Sinatra que disfrutaba de uno de los descansos del rodaje. Por aquel entonces, Mia Farrow rodaba la serie Peyton Place.
Frank Sinatra y Mia Farrow, pocos días después de conocerse

Pero, probablemente, el suceso más escabroso durante el rodaje de El Coronel Von Ryan ocurrió en España. Más concretamente en Torremolinos (Málaga), donde también se encontraban captando exteriores. Eduardo García Maroto, director de producción de películas norteamercianas rodadas en nuesto país, fue testigo del siguiente suceso. El 19 de septiembre de 1964 Frank Sinatra se encontraba hospedado en el Hotel Pez Espada de Torremolinos. Ese día concedió una entrevista a Avellaneda, periodista del diario Pueblo. Durante la entrevista, Frank Sinatra se ausentó un momento para acudir al baño. A su regreso, la actriz cubana Ondina Canibano, que también se encontraba en dicho hotel, se acercó al cantante con intención de saludar. El periodista Avellaneda quiso inmortalizar el encuentro con una fotografía y Sinatra malinterpretó la situación como un montaje para acusarle de mantener una relación con aquella actriz. El cantante arrojó la cámara rompiéndola contra el suelo. Ondina Canibano, molesta, arrojó al rostro de Frank los restos de su copa. El cantante la agarró por el pelo, al parecer, con intención de arrastrarla por el suelo. Algunos presentes evitaron que los hechos llegaran a más y el periodista Avellaneda tuvo que salir "por piernas", perseguido por los escoltas de Frank Sinatra.
Frank Sinatra, en el Hoterl Pez Espada

Frank Sinatra fue denunciado por el fotógrafo de Avellaneda y la Policía Nacional acudió al hotel, para tomarle declaración. Francisco Romera Estremera, chófer del cantante, recuerda: "llegaron muchos policías, pero él se negó a salir de su habitación". Ante la situación Eduardo García Maroto intentó negociar con la Policía, advirtiendo al comisario jefe de la mala imagen que nuestro país tendría en todo el mundo, a partir de aquella noticia. Así, los policías abandonaron el hotel pero, tres días más tarde, volvieron. Frank Sinatra fue detenido por desacato a la autoridad con 25.000 pesetas de multa. Gracias a su intercesor, a las pocas horas, pudo abandonar España. Eso sí, antes de hacerlo, escupió sobre un retrato de Francisco Franco gritando "jamás volveré a este jodido país repleto de bastardos fascistas". El odio hacia España es ya parte de la leyenda en la vida de Frank Sinatra. No volvió hasta la década de los ochenta, cuando el general paquito ya era historia...degraciada historia.
Diario Pueblo
Imagen de Frank Sinatra en Torremolinos
Frank Sinatra abandona el Hotel Pez Espada y entra en su coche
Por si no hubiera tenido bastnate en el pasado, con las aventuras taurinas de Ava Gardner en España, Frank terminó de odiar a nuestro país en este incidente. Pero, como por costumbre, en este blog nos quedamos con la calidad artísitica del cantante y no con su vida quiero terminar el post con un tema titulado South of the border (down Mexico way) y otro más titulado It happened in Monterey, en una versión casi inédita, en directo desde Vancouver. Aunque la calidad sonora del primer video deja mucho que desear, es un documento histórico ya que se trata del estreno de la canción, en 1953. Por cierto, tema arreglado por Nelson Riddle. South of the border... al sur de la frontera, al menos en España, nunca fue buena experiencia para Frank Sinatra.



miércoles, 22 de enero de 2014

De Rudyard Kipling a Frank Sinatra: On the road to Mandalay

Frank Sinatra en el estudio de grabación. Sesiones para el LP "Come fly with me" (1957)

Una de las canciones más extrañas que ha grabado Frank Sinatra se incluyó en el álbum Come fly with me, ese álbum de viajes que dio la vuelta al mundo y se titulaba On the road to Mandalay. Se trata de una canción swing pero con unos cambios de ritmo y una orquestación que la convierten en algo especial. Fue grabada en octubre de 1957 y el arreglo de Billy May está destinado a recrear una atmósfera exótica para trasladarnos a Mandalay (la antigua capital de Birmania) y para ello, utiliza instrumentos de viento poco usuales y algunos cambios de ritmo que pueden resultar algo extraños. Pero la historia de esta canción es también muy controvertida. El tema fue estrenado por Sinatra en este álbum y está compuesto por Oley Speaks sobre el poema de Rudyard Kipling titulado Mandalay. Este poema fue publicado en 1892 en la colección de Kipling Barrack Room Ballads y es un texto dedicado a la antigua capital de Birmania, colonia británica de 1885 a 1947, haciendo referencia a la Antigua Pagoda de Mawlamyine (nombre actual de la antigua Mandalay)

Rudyard Kipling
Lo cierto es que Frank Sinatra estrenó la canción en 1957, con el lanzamiento del álbum Come fly with me y en ella se utilizaban las dos últimas estrofas del poema de Kipling, para las dos últimas estrofas de la canción, a modo de homenaje al poeta nacido en Bombay. Este no fue el problema. Pero la familia heredera de Kipling consideró que el ritmo de la canción, con base swing, era totalmente inapropiado y podía ser considerado una burla al poema de su padre. De este modo, el álbum Come fly with me fue distribuido en Gran Bretaña sustituyendo el tema On the road to Mandalay por el de Chicago. Sin embargo, dos años más tarde, Frank Sinatra cantó On the road to Mandalay durante un concierto en Australia, explicando y bromeando sobre las objeciones de la familia Kipling hacia aquella canción. A continuación veremos el texto del poema y cómo la canción estrenada por Frank Sinatra utiliza solo la primera y la última estrofa, destacadas aquí en negrita.

 By the old Moulmein Pagoda, lookin' lazy at the sea,
There's a Burma girl a-settin', and I know she thinks o' me;
For the wind is in the palm-trees, and the temple-bells they say:
"Come you back, you British soldier; come you back to Mandalay!"
                    Come you back to Mandalay,
                    Where the old Flotilla lay:
                    Can't you 'ear their paddles chunkin' from Rangoon to Mandalay?
                    On the road to Mandalay,
                    Where the flyin'-fishes play,
                    An' the dawn comes up like thunder outer China 'crost the Bay!

'Er petticoat was yaller an' 'er little cap was green,
An' 'er name was Supi-yaw-lat — jes' the same as Theebaw's Queen,
An' I seed her first a-smokin' of a whackin' white cheroot,
An' a-wastin' Christian kisses on an 'eathen idol's foot:
                    Bloomin' idol made o'mud —
                    Wot they called the Great Gawd Budd —
                    Plucky lot she cared for idols when I kissed 'er where she stud!
                    On the road to Mandalay . . .


When the mist was on the rice-fields an' the sun was droppin' slow,
She'd git 'er little banjo an' she'd sing "Kulla-lo-lo!"
With 'er arm upon my shoulder an' 'er cheek agin' my cheek
We useter watch the steamers an' the hathis pilin' teak.
                    Elephints a-pilin' teak
                    In the sludgy, squdgy creek,
                    Where the silence 'ung that 'eavy you was 'arf afraid to speak!
                    On the road to Mandalay . . .


But that's all shove be'ind me — long ago an' fur away,
An' there ain't no 'busses runnin' from the Bank to Mandalay;
An' I'm learnin' 'ere in London what the ten-year soldier tells:
"If you've 'eard the East a-callin', you won't never 'eed naught else."
                    No! you won't 'eed nothin' else
                    But them spicy garlic smells,
                    An' the sunshine an' the palm-trees an' the tinkly temple-bells;
                    On the road to Mandalay . . .

I am sick o' wastin' leather on these gritty pavin'-stones,
An' the blasted Henglish drizzle wakes the fever in my bones;
Tho' I walks with fifty 'ousemaids outer Chelsea to the Strand,
An' they talks a lot o' lovin', but wot do they understand?                 
Beefy face an' grubby 'and —
Law! wot do they understand?
I've a neater, sweeter maiden in a cleaner, greener land!
On the road to Mandalay . . .

Ship me somewheres east of Suez, where the best is like the worst,
Where there aren't no Ten Commandments an' a man can raise a thirst;
For the temple-bells are callin', an' it's there that I would be —
By the old Moulmein Pagoda, looking lazy at the sea;
                    On the road to Mandalay,
                    Where the old Flotilla lay,
                    With our sick beneath the awnings when we went to Mandalay!
                    On the road to Mandalay,
                    Where the flyin'-fishes play,
                    An' the dawn comes up like thunder outer China 'crost the Bay!


(Mandalay, Rudyard Kipling)

A continuación la canción censurada en Gran Bretaña, On the road to Mandalay, en su enérgico estreno (1957) Por cierto, que a Frank Sinatra nunca le gustó este tema. Si lo cantó alguna vez en directo, fue para fastidiar a la familia Kipling. Siempre trató de cantarla en territorio británico.






Fotografía de Mawlamyine, antigua Mandalay

sábado, 18 de enero de 2014

Frank Sinatra y Woody Allen (Annie Hall y el pifostio de Mia Farrow)

Si Frank Sinatra pudiera leer todo lo que siguen hablando de él después de muerto...

Repasamos hace tiempo la extraña relación entre Woody Allen y Frank Sinatra, con el sórdido nexo en común que supuso Mia Farrow. Fue aquí. El otro día vi Annie Hall (1977) En esta época Woody Allen todavía no tenía nada que ver con Mia Farrow. Sin embargo, Annie (Diane Keaton) alude en un sueño al cantante. A continuación escribo el diálogo:
Frank y Mia durante su fugaz y tormentoso matrimonio

Annie Hall: De repente, en el sueño, apareció Frank Sinatra y se abalanzó sobre mí, en la cama. Cogió la almohada e intentó ahogarme con ella. Después yo, intentándome zafarme de Frank, de un manotazo le rompí las gafas. 

Alvy Singer (Woody Allen): Perdona, pero Frank nunca ha llevado gafas  

Annie Hall: Claro que no. Es que, según me ha dicho mi psicoanalista, Frank Sinatra eras tú. Después de romperle las gafas, se puso a cantar pero no con su voz sino con otra, muy, muy aguda
Diane Keaton como Annie Hall

No deja de ser curioso que Alvy Singer (Alvy Cantante) sea reinterpretado en el sueño de Annie como un cantante, como Frank Sinatra. Pero el caso es que, sin tener nada contra Frank, en 1977 Woody Allen lo presenta en el sueño de Annie como una asesino mafioso. Y diez años más tarde, cuando él y Frank se llevaban a matar, poco menos que le rinde un homenaje en la película Radio days. Todo muy curioso. Por eso, ya no me sorprende que el pasado mes de octubre saliera la Farrow diciendo que Ronan, primer hijo biológico con Woody Allen, sea en realidad, hijo de Frank Sinatra con el que, según ella, nunca llegó a romper su relación. Más información en El Mundo Lo que creo es que a la Farrow se le ha ido un poquito la chaveta. A tales insinuaciones, Barbara Sinatra, viuda del cantante, dijo "Esto no es más que un montón de basura" El propio Woody Allen dijo, por boca de su representante, que la afirmación de Mia Farrow era tan absurda que no valía la pena comentarlo. Y el afectado, Ronan Farrow, le salió su vena irónica poniendo en twitter: "Todos somos hijos de Frank". Bueno, ya lo decía Dean Martin: "es el mundo de Frank. Nosotros solo vivimos en él" 
Ronan Farrow (little blue eyes?) y Mia

Después de toda esta historia, lo cierto es que me encantó la película Annie Hall. Annie es cantante en un nightclub y lo hace, bueno, pasable. Interpreta el clásico de Isham  Jones y Gus Kahn It had to be you. Temazo que canta así de bien Franky, a  principios de los cincuenta.



Para terminar, recomiendo esta entrada sobre Frank Sinatra realizada por un nostálgico que se hace llamar Horacio Verwhisky del blog Siete pasos al paradalso. La música de fondo es In the wee small hours of the morning y Guess I'll hang my tears out to dry: aquí

miércoles, 15 de enero de 2014

Quiet nights of quiet stars (Corcovado)

Frank Sinatra y Antonio Carlos Jobim en el estudio de grabación
El músico brasileño Antonio Carlos Jobim, uno de los creadores de la bossa nova, participó de una de las más fructíferas colaboraciones en la historia del jazz, al unir los acordes de su guitarra a la voz de Frank Sinatra. Los dos colaboraron reunidos en el mismo estudio de grabación en un total de dos ocasiones. También lo harían ante las cámaras de televisión y por último, en la década de los noventa, al cantar juntos Fly me to the moon en el disco Duets. De estas sesiones de grabación quiero elegir hoy el tema Corcovado compuesto por el mismo Antonio Carlos Jobim. La versión de Frank Sinatra es una de las mejores elecciones antes de ir a dormir. Una auténtica maravilla que ya había incluido en este blog. Pero como aquel video ha desaparecido, lo vuelvo a colgar. Una vez más Quiet nights of quiet stars (como se tituló en Estados Unidos Corcovado). Primero escucharemos la grabación original y después veremos unas grabaciones posteriores que incluyen esta canción. La última, procede de A concert for the Americas y Sinatra canta junto al guitarrista Tony Mottola.



La siguiente grabación es un medley de Sinatra y Jobim para celebrar su primera colaboración juntos:


Por último Quiet nights of quiet stars grabada en directo desde los Altos de Chavón (República Dominicana) en 1982 Frank Sinatra canta y Tony Mottola le acompaña a la guitarra:



Silenciosas noches de silenciosas estrellas (Traducción de "Quiet nights of quiet stars") 

Silenciosas noches de silenciosas estrellas 
Silenciosos acordes de mi guitarra 
flotando en el silencio que nos rodea 
Silenciosos pensamientos, silenciosos sueños 

Desde la ventana se puede ver la montaña y el mar 
¡cuánta belleza!
 Aquí es donde yo quiero estar 
Aquí contigo tan cerca de mi 
hasta que el último parpadeo de esta vida 
se convierta en ascua 

Yo, que estaba perdido y solitario 
creyendo que la vida era tan solo un amargo y trágico chiste, 
he encontrado contigo
el significado de la existencia. 
Oh, mi amor. 

Yo, que estaba perdido y solitario 
creyendo que la vida era tan solo un amargo y trágico chiste, 
he encontrado contigo el significado de la existencia. 
Oh, mi amor.